Este jueves experto en temas de seguridad, políticas públicas y buena convivencia confluyeron con análisis y diagnósticos en la sala Cabrujas de Chacao en el marco del foro “Seguridad Ciudadana y la vida urbana” que llevó a cabo Amnistía Internacional Venezuela, en alianza con la organización Una Sampablera por Caracas, como parte de su proyecto Reingeniería de la Seguridad Ciudadana.
Nelson De Freitas, miembro fundador de Una Sampablera por Caracas, dio la bienvenida a los asistentes y exaltó que estos espacios sirven para analizar y potenciar las posibles respuestas ante las múltiples causas de la violencia en Venezuela y movilizan la opinión pública hacia la exigencia de políticas que garanticen la protección integral de las personas.
La perspectiva de Amnistía Internacional sobre este tema la expuso Natalia Gan, coordinadora del proyecto Reingeniería de la Seguridad Ciudadana, quien recordó que la ONG publicó mundialmente en septiembre pasado el informe “Esto No es Vida” donde se determina la responsabilidad del Estado venezolano en la violación del derecho a la vida y a la integridad personal de cientos de víctimas.
“El Estado es responsable de los altos índices de violencia en dos niveles. El primero radica en su incapacidad para garantizar el derecho a la vida en contexto de violencia entre particulares y el segundo se centra en la implementación de medidas represivas para atender la delincuencia, lo cual ha ocasionado graves violaciones a derechos humanos y en especial un número alarmante de ejecuciones extrajudiciales”, explicó Gan.
Por su parte, José Luis Fernández-Shaw, sociólogo y especialista en violencia armada, explicó que la opacidad del Estado venezolano en la recolección y publicación de cifras sobre las muertes violentas en el país es una constante en todas las instituciones y un problema para analizar las causas de la violencia. “Urge un sistema integrado de vigilancia de la violencia, donde los datos sean sistemáticos, consistentes y oportunos para la creación de políticas que reduzcan los índices de violencia”, concluyó.
La arquitecta e investigadora del proyecto, “Crecimiento de la cultura ciudadana, seguridad e integridad física” junto al Observatorio Venezolano de Violencia y otras organizaciones locales, Carmen Ofelia Machado, resaltó que actualmente, se fomenta una nueva y caótica forma de vida urbana sujeta al control del territorio tanto por organismos de seguridad como por bandas armadas. Por ello y para reconciliar a las personas con su ciudad, se deben implementar políticas públicas integrales en torno a la vivienda y programas de inclusión especialmente en los barrios y sectores más vulnerables.
Nota de prensa