Estados Unidos continúa sumamente preocupado con los graves abusos y violaciones que se detallados en el informe de los derechos humanos de la ONU. Este informe sobre Venezuela ilustra la profundidad de la desesperación y de la crisis humanitaria en este país. El mismo confirma que Nicolás Maduro y sus matones están cometiendo graves violaciones a los derechos humanos de los venezolanos, privándoles de sus derechos y libertades fundamentales a través de una sistemática represión, tortura e intimidación.
Una de las estadísticas más perturbadoras es que las Fuerzas de Acciones Especiales del ex régimen de Maduro mataron por lo menos a 5.287 personas en 2018 y, como mínimo, otras 1.569 hasta el mes de mayo de 2019.
Este informe apareció después de la presunta tortura y asesinato del Capitán de Corbeta Rafael Acosta Arévalo, oficial de la Armada Bolivariana de Venezuela, quien murió mientras estaba bajo la custodia de los matones de Maduro y sus asesores cubanos. Expresamos nuevamente nuestras más sentidas condolencias a su familia y seres queridos.
Ninguna dictadura dura para siempre. Venezuela pronto será libre y los responsables por los abusos y violaciones a los derechos humanos en el país tendrán que rendir cuentas. La comunidad internacional debe condenar al régimen ilegítimo de Maduro y unirse para luchar contra su deliberada falta de respeto a los derechos humanos e impunidad.
Apelamos a los países que aún no han reconocido formalmente al presidente interino Guaidó a que lo hagan tan pronto como sea posible y retiren todo apoyo al control de facto del poder del ex régimen de Maduro.
Nota de prensa.