Durante la calurosa noche del 6 de julio en California, miles de estadounidenses fueron sorprendidos por otro intenso movimiento sísmico, de magnitud 7.1, que volvió a encender las alertas sobre la latente activación de la famosa Falla de San Andrés.
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El evento ocurrió nuevamente en la localidad de Ridgecrest, tal como sucedió en horas de la mañana.
Ladies & gents… a 7.1 ?? #earthquake #earthquakeLA #earthquakecalifornia pic.twitter.com/1P0VvSltgs
— Jennifer Pfister (@Saispas75) July 6, 2019
Mientras las autoridades de protección civil todavía no informan sobre el control de daños, ni se reportan pérdidas humanas, las redes sociales albergan gran cantidad de grabaciones que documentaron el sismo.
Desde restaurantes hasta juegos de Grandes Ligas, todo el suroeste de EEUU alcanzó a percibirlo.