Con el regreso a EEUU de Doria Ragland, la madre de Meghan Markle, luego de haber pasado varios días ayudando a su hija con el cuidado del pequeño Archie Harrison Mountbatten-Windsor, las tres niñeras que contrataron lo Duques se volvieron piezas centrales en el Palacio británico. Así lo reseña infobae.com
Es que los nuevos padres confiaron en un equipo de personas para ayudar a a la duquesa de Sussex, de 37 años, con la crianza del bebé ya que el príncipe Harry no se tomó licencia por paternidad. Esas tres figuras asumieron muchas de las responsabilidades que hasta el momento recaían en la abuela materna pero parece que Meghan ubicó la vara de exigencias muy alta…
No pasaron ni 15 días que el equipo sufrió una baja: ya hay una niñera que renunció.Hasta el momento, no se conoce su identidad, pero sí trascendió que hizo las maletas muy deprisa y decidió de forma contundente que no quería seguir trabajando para los Duques.
La prensa británica ya culpa a Meghan de la deserción y afirman que no fue un tema de dinero, ya que el salario es muy superior a la media para este tipo de trabajo: la contrataron por USD 80 mil al año, unos 6.700 por mes, muy por encima de los 1.800 que se suele pagar en Inglaterra por esa tarea.
Además, en el Reino Unido, es considerado un gran honor trabajar para la reina Isabel II y para toda la corona real por lo que este tipo de renuncias siempre sorprende.
La decisión de la niñera también vuelve a poner en el centro el desfile de dimisiones en el entorno de la duquesa que alimenta su fama de poco tolerante. La niñera, de hecho, es la cuarta persona de su staff que la abandona: primero fue un guardaespaldas del matrimonio, después dos de sus asistentes personales.
Los tabloides británicos sugieren que el trato que Markle dispensa a los miembros de su personal generó todas estas renuncias. Y, además, no faltan quienes marcan la gran diferencia entre los modales de Markle con los de Kate Middleton, quien siempre fue extremadamente cuidadosa con su comportamiento.
Archie, séptimo en la línea de sucesión al trono británico y octavo bisnieto de la reina Isabel II,nació a las 5:26 hras de la mañana (hora local) del 6 de mayo, con un peso de 7 libras y 3 onzas (3,26 kilos).