Los escombros de Maduro han llegado muy lejos en esta edición: Como vaticinaron los amigos de El Espectador de Colombia, puede que queden pocos días de luz en Venezuela, y poco a poco vemos cómo el ciudadano vivo, comienza a jugar sucio a sus propios compatriotas.
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¿Venezolano pisándole la cola a otro venezolano? En las redes sociales no hay nada oculto, y a través de Facebook, se descubrió a una persona que vendía LEÑA, y ojo, si no tienes efectivo puedes pagar tu trozo de madera CON PUNTO.
Si accedes a seguir la sinvergüenzura de este señor para no quedarte sin cocina o luz, no protestes por tus derechos, sino apela por la vía fácil, así como hicieron millones de personas hace 20 años, cuando se les ocurrió la idea de regalarle el futuro del país al intergaláctico de Barinas.