Fiscales brasileños dijeron el miércoles que las gigantes comerciales Vitol, Trafigura y Glencore pagaron más de 30 millones de dólares en sobornos a empleados de la compañía estatal Petrobras a cambio de negocios.
Estos supuestos pagos ilícitos son los últimos que se conocen de la investigación Lava Jato, que reveló el esquema de corrupción más grande de Brasil en décadas y ha dejado al descubierto información perjudicial sobre las actividades de Petrobras.
Los fiscales indicaron que empleados de Petrobras ofrecían a las compañías comerciales precios más baratos del petróleo y sus derivados, y luego compartían el ahorro generado.
Hay evidencia de que al menos dos de los empleados aún trabajan en Petrobras, dijeron los investigadores.
La fiscalía considera que los sobornos pagados por empleados de Glencore, Trafigura y Vitol representan la mitad del total de las coimas, o unos 15,3 millones de dólares, entre 2009 y 2014. No se dieron a conocer los nombres de otras empresas investigadas.
Los empleados involucrados trabajaban en la mesa de comercio de Petrobras en Houston, Estados Unidos, y en la sede de la compañía en Río de Janeiro, dijeron los fiscales.
Un representante de Trafigura dijo que la compañía no comenta sobre asuntos legales. Los funcionarios de Petrobras, Glencore y Vitol no respondieron a una solicitud de comentarios.
Tanto Vitol como Glencore recientemente realizaron adquisiciones relacionadas con la distribución de gas en Brasil. Vitol, con sede en Holanda, compró el 50 por ciento de Rodoil en octubre y Glencore compró el 78 por ciento de Ale Combustiveis este año.
Por otra parte, Petrobras, la compañía más grande de Brasil y América Latina por capitalización de mercado, anunció un plan de negocios que plantea recaudar 26.900 millones de dólares por desinversiones hasta el 2023.
Está programado que Petrobras realice una conferencia telefónica sobre el plan de negocios a las 1600 GMT, pero no estaba claro si la compañía responderá sobre las acusaciones.
Reuters