Las precipitaciones que durante las últimas horas han azotado diversos puntos de Guatemala generaron este jueves el descenso de lahares fuertes del volcán de Fuego, uno de los que están en constante actividad en el país.
EFE
El Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología indicó, en un boletín especial, que el material se dirige a las barrancas Seca, Santa Teresa y el Mineral, cauces afluentes del río Pantaleón.
Los lahares afectan a las vías de acceso a los pasos vehiculares de algunas aldeas aledañas, como Yepocapa y Sangre de Cristo, Finca Palo Verde y El Porvenir.
“Es posible que el lahar descienda caliente y levante columnas de desgasificación con olor a azufre. Transporta material volcánico, ceniza, arena y bloques de uno a tres metros de diámetro que hacen vibrar el terreno y generan sonidos de choque de rocas”, advirtió el ente científico.
No obstante, debido a las constantes lluvias sobre el complejo volcánico, el instituto advirtió que se pueden generar lahares en otras barrancas durante las próximas horas, por lo que insta no permanecer en estas áreas y estar alerta de la información oficial.
El volcán, ubicado a una distancia de unos 50 kilómetros de la capital, presenta este jueves una fumarola de color gris clara a unos 4.400 metros de altura que se dispersa hacia el oeste y suroeste, y genera entre 8 y 12 explosiones por hora que levantan una columna de ceniza a 5.000 metros de altura.
El pasado 3 de junio, en su tercera erupción del año -la más fuerte de su historia-, el coloso, de 3.763 metros de altura, provocó la muerte de más de 190 personas y dejó 1,7 millones de afectados.