¡FIRULAIS! Se dejó pasar la lengua por un perro, contrajo una infección y se quedó sin nariz, brazos ni piernas (VIDEO)

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Los síntomas de Greg Manteufel comenzaron con fiebre y vómitos, como si tuviera la gripe. Pero a la mañana siguiente estaba delirando y su temperatura se había disparado.

Su esposa lo llevó rápidamente al hospital desde su casa de Wisconsin. Cuando llegaron, Dawn Manteufel relató que aparecieron moretones en todo su cuerpo y que no los tenía en el momento de salir de su casa, unos cinco minutos antes. Para Dawn fue como si acabasen de golpear a su marido con un bate de béisbol.





Después de una semana en el hospital perdió las piernas. Y después las manos.

Greg Manteufel sufrió una rara infección en la sangre luego de que bacterias dañinas de la saliva de un perro se filtraran en su torrente sanguíneo. Eso provocó sepsis o envenenamiento de la sangre por bacterias. La sepsis dio lugar a manchas de sangre que parecían hematomas en todo su cuerpo, particularmente en el pecho y la cara. Los médicos lo ‘bombardearon’ con antibióticos para detener la infección, pero los coágulos bloquearon el flujo de sangre a sus extremidades, causando la muerte de los tejidos y los músculos.

Dawn explicó que la bacteria, llamada Capnocytophaga canimorsus, acababa de atacarlo y lo hizo de una manera rápida y agresiva. Para salvar su vida, los médicos tuvieron que cortarle las piernas desde la rodillas hacia abajo, y luego las manos.

“¿Por qué él? ¿Por qué nos pasó esto a nosotros?”, preguntaba Dawn.

La Capnocytophaga canimorsus es una bacteria que se encuentra comúnmente en perros y gatos. Está presente en la saliva de la mayoría de los perros sanos y, por lo general, no es dañino para los humanos. Pero en algunos casos, el organismo puede envenenar la sangre y causar la muerte.

Dawn apuntó que no sabe qué perro portaba la bacteria que atacó a su esposo. En el momento en que se enfermó, había tenido contacto con ocho perros, incluido uno que pertenece a la pareja. La bacteria podría provenir de cualquiera de esos perros que lo lamieron.

“A él le encantan los perros. Tocaría a cualquier animal porque le fascinan”, agregó sobre su esposo, con el que se casó hace 15 años.

Greg Manteufel ha estado en el centro hospitalario Froedtert & The Medical College of Wisconsin en Milwaukee durante aproximadamente un mes. A última hora de la mañana del martes, varios médicos se reunieron alrededor de su cama, revisaron sus signos vitales y le hicieron preguntas. Él mientras tanto, yacía con los muslos apoyados en una almohada. Acababa de someterse a una cirugía para extirpar tejido muerto y músculo de lo que quedaba de sus extremidades inferiores. Esta semana, tendrá dos intervenciones más para limpiar el tejido muerto.

La Capnocytophaga canimorsus se transmite comúnmente por mordeduras de perro y suele ser potencialmente mortal para las personas que sufren de alcoholismo o son asplénicas, lo que significa que sus bazos no funcionan con normalidad o ausencia del mismo. Los síntomas generalmente empeoran rápidamente.

Un informe publicado por la revista BMJ contó la historia de una mujer mayor que pudo haber sido lamida por su mascota doméstica, y que más tarde sufrió sepsis y fallos en uno de sus órganos. La mujer se recuperó después de dos semanas en una unidad de cuidados intensivos que acertadamente llamó a las bacterias que causan la sepsis como “la merida de la muerte”.

Fuente y más información en: Infobae