Desde hace tres meses, Julio César Conde Lara, de 34 años, permanece detenido en los calabozos del comando de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) ubicado en Coche, por haber intentado robarle el celular a un adolescente de 15 años, bajo amenaza de muerte, reseña El Universal.
El hombre, quien es el padre de los tres niños asesinados la mañana del viernes en el barrio El 70 de El Valle, fue capturado en flagrancia y condenado este jueves (un día antes del crimen de sus hijos) a cuatro años y cinco meses de prisión. Le asignaron como centro de reclusión el penal El Rodeo II, y esperan la asignación del cupo.
Este lunes en la mañana a las afueras del comando militar llegó el cortejo fúnebre con los tres ataúdes, pues la intención de los familiares del detenido era que lo dejaran ver a sus hijos por última vez.
Sin embargo, este petitorio no fue aceptado por las autoridades castrenses, y las personas debieron retirarse y continuar con el entierro de los cadáveres.