Familiares de Jenxel Alexander Frías Salazar, de 20 años, denunciaron que el joven murió la mañana del martes 27 de febrero en la celda que le habían asignado en el centro penitenciario El Rodeo II en Guatire, estado Miranda. Así lo reseña laverdaddevargas.com
Sufrió un estrangulamiento intestinal producto de una peritonitis, según el diagnóstico médico forense que le hicieron luego en la morgue de Bello Monte.
Los parientes lamentaron que no haya recibido atención médica inmediata, pues desde el domingo había manifestado fuertes dolores abdominales. Incluso, dijeron que solo lo llevaron a la enfermería del penal pero no lo atendieron por falta de médicos.
Al parecer, solo le refirieron analgésicos y lo regresaron a la celda, donde pasó el día lunes muy grave y murió al día siguiente.
Los parientes, más allá del drama de soportar la muerte del muchacho, explicaron que lo habían recluido en ese centro penitenciario desde diciembre del año pasado al ser acusado de haber abusado sexualmente de su novia, una menor de 13 años.
Jenxel vivía con su familia en el barrio Mirabal de Catia La Mar, estado Vargas, y trabajaba como técnico electricista y mantenimiento en la empresa Cargill de Venezuela.
Tenía una relación amorosa con una vecina, de 13 años, pero la familia de la joven no la aceptaba, pese a que él había manifestado querer casarse con ella cuando la edad se lo permitiera.
Sin embargo, contaron los deudos, que la madre de la adolescente se negaba rotundamente a la unión y juró “que lo iba a hundir por haber abusado de su hija”.
En octubre del año pasado la suegra lo denunció por maltrato hacia la jovencita y él mismo se presentó ante el Cicpc Vargas para enfrentar los cargos que le querían imponer.
Aunque la muchachita dijo que la relación era formal, pese a la negativa de su familia, el joven quedó detenido. Todo esto lo explicaron los familiares del fallecido en la morgue de Bello Monte.
Detallaron, además, que “por influencias de la familia de la jovencita”, a Jenxel lo condenaron a 11 años y 9 meses de cárcel por el delito de violencia física y sexual contra la menor de edad reseña El Universal.
“Nosotros hicimos todo lo posible para que mi hijo no lo condenaran, pero más pudo esa familia con sus influencias. Todos somos conocidos del mismo barrio, ellos crecieron juntos”, declaró el padre del fallecido, Ángel Frías.