Asfixiados por la terrible crisis económica, cada vez son más los venezolanos que cruzan la frontera con Colombia para contrabandear alimentos, muchas veces carne en proceso de descomposición.
Llegan a Arauca a ofrecer queso y carne dentro de maletines y bolsas plásticas, reseña un trabajo del programa Testigo Directo, del canal Caracol.
A orillas del río con el mismo nombre ofrecen todo tipo de cortes y de carnes en la cantidad que el cliente desee.
El fenómeno está llevando a la quiebra a muchos comercios colombianos y según ingenieros de alimentos, representa un peligro para la salud pública, pues los vendedores recurren al formol para retrasar el proceso de descomposición de la carne.
Según las autoridades, los controles y decomisos son recurrentes en la zona pero a pesar de los esfuerzos para erradicar el contrabando, parece imposible eliminarlo, pues cientos de kilos de diferentes productos siguen pasando en lancha por las aguas del río Arauca.