Las autoridades mexicanas hallaron una fosa clandestina con ocho cadáveres “en estado muy avanzado de putrefacción” en el poblado El Testarazo, en el occidental estado de Nayarit, dijo hoy a Efe el presidente del colectivo Familias Unidas, Santiago Pérez.
La fosa fue localizada el viernes en el campo de cultivo Loma de los Coyotes, después de que un campesino “se percatara de unos olores desagradables mientras recogía la cosecha de caña” y avisara a las autoridades, que -guiadas por un equipo canino- encontraron los cuerpos en descomposición.
El agricultor tuvo la impresión de que el fétido olor podía corresponder a una fosa, debido a que a un kilómetro de distancia las autoridades habían detectado otras recientemente.
Pérez señaló que todavía se desconoce la identidad de los fallecidos, pero que llevaban soterrados “alrededor de 7 y 8 meses”.
El líder de la organización explicó que trataron el descubrimiento con sumo cuidado antes de avisar a los medios de comunicación por una cuestión de respeto a las víctimas.
Hasta ahora van un total de 9 fosas encontradas en el occidental estado de Nayarit derivadas, según el vocero, “de la guerra del crimen organizado, la disputa, la lucha por el dinero”.
El hallazgo más reciente antes de este fueron los restos de 33 personas, tres de ellas mujeres, localizados durante los días 13, 15 y 16 de enero en cuatro fosas clandestinas del municipio mexicano de Xalisco, en Nayarit.
Hasta la fecha hay registradas en este estado 173 denuncias de personas desaparecidas, 94 de ellas aún sin localizar, mientras que 63 fueron encontradas con vida y 16 fallecidas.
El portavoz del colectivo lamentó que la mayoría de los cuerpos encontrados en fosas sean civiles que pagan las consecuencias del crimen organizado.
“Aunque al principio no, actualmente sí hemos visto mucha actividad por parte de la gente de la fiscalía, andan investigando, están en la búsqueda”, expresó Pérez.
EFE