Familiares de varios venezolanos desaparecidos al zozobrar el martes la embarcación en que emigraban a Curazao pidieron a las autoridades ayuda para la búsqueda de sobrevivientes del naufragio, del que fueron rescatados los cuerpos de cuatro personas, reseñó AFP.
Las autoridades de Curazao encontraron el miércoles los cuerpos de dos mujeres y dos hombres, pero medios locales indican que la lancha habría zarpado de las costas de La Vela de Coro, en el estado venezolano Falcón (noroeste), con una treintena de tripulantes.
“Queremos saber de nuestros familiares, que esto no se quede así como en otras ocasiones”, dijo a medios locales Rosa Cásares, esposa de un joven de 22 años desparecido.
Según un vocero de la policía de Curazao, la pequeña embarcación se accidentó frente a las costas de la isla y varias patrullas se desplegaron desde el miércoles en la búsqueda “de más cuerpos o sobrevivientes”.
Venezuela atraviesa una aguda crisis política, social y económica que ha provocado una oleada de emigración en busca de un futuro mejor.
“Ustedes saben cómo está la situación, cómo estamos viviendo en este país, se fueron para ayudarnos”, declaró Rosaura Cásares, madre de Abdiel, un joven de 21 años que logró sobrevivir.
Cásares logró comunicarse con su hijo a través de Facebook, quien le confirmó que se encuentra bien y que otros cuatro del grupo estaban con él, en un lugar que no reveló.
“Estoy bien gracias a Dios, aunque un poco golpeado”, escribió Abdiel a la AFP en un mensaje privado contactado a través de esa red social.
Joe Cabo, subdirector de Protección Civil de Falcón, aseguró vía telefónica a la AFP que “se están haciendo investigaciones con los familiares o allegados de los que aparecen en las fotos (que circulan en redes) para saber la condición de los demás”.
En rueda de prensa, Luis Stefanelli, diputado opositor por el estado Falcón, precisó que la lancha salió cargada con “unas 30 personas, todos ellos (de) menos de 35 años, algunos menores de edad”, en “condición de inmigrantes ilegales”.
“Pagaron cada uno alrededor de 100 dólares” para ser llevados a la cercana isla de Aruba, recalcó el parlamentario.
“Es tráfico de seres humanos. Este peñero zozobró y muchos se ahogaron. Es imposible determinar cuántos, porque los que llegaron a la costa se escondieron temerosos de su situación de inmigrantes ilegales”, afirmó.
El accidente ocurrió en medio de las tensiones generadas luego de que el presidente venezolano Nicolás Maduro ordenara el 5 de enero el cierre del tráfico aéreo y marítimo con Aruba, Curazao y Bonaire, argumentando que la medida es necesaria para frenar mafias de contrabando de bienes venezolanos.
Tomás Páez, sociólogo experto en emigración, aseguró a la AFP que entre 400.000 y 500.000 venezolanos han abandonado el país en los dos últimos años.