La palabra unidad se define como la propiedad que tienen las cosas de no poder dividirse ni fragmentarse sin alterarse o destruirse. Así tal cual este concepto, debería regir en la política venezolana. Es decir, estamos unidos por un mismo objetivo de país, que debe ser superior a cualquier apetencia o interés personal de alguna de las partes involucradas en esta misión. Vista de esta manera, es una especie de blindaje contra cualquier provocación, peine, egoísmo, envidia, para así avanzar en el tiempo y obtener los resultados de cambio tan anhelados por el pueblo venezolano.
La unidad política debe ser para buscar mecanismos afines y comunes de encuentros para alcanzar el cambio en el modelo político del país, que todos sabemos, nos ha hecho mucho daño y nos ha sucumbido a los sótanos de la miseria, del hambre, de la pobreza, de la violencia, de la inseguridad y del desastre, que nos afecta a todos sin distinción de credo, raza, ideología o posición social.
La unidad debe ser para encontrar verdaderas alianzas constitucionales, civiles y pacíficas que nos conduzcan a un camino de entendimiento y de grandeza como fortaleza y esperanza de millones de personas. El cambio que ha de darse en Venezuela, sólo es viable con la unión y el esfuerzo de todos. Eso que llamamos unidad suprema y a prueba de balas.
No es justo para el país, para nuestro pueblo y para la historia, orquestar campañas de descrédito de unos con otros, en una especie de pesca en río revuelto, donde no hay ganadores, porque la gente se desmotiva y se decepciona de actitudes tan mezquinas, que pretenden acabar con otro líder o con una organización política, y lo único que logran es darle más fuerzas y herramientas al adversario, que es justo allí donde debe ir enfocada nuestra lucha y nuestro accionar.
El llamado de atención es para que reflexionemos acerca del papel que tenemos ante la historia, y a no perder el norte de nuestra lucha política. Basta de emplear las redes sociales para hacer campañas sucias anónimas o frontales; basta de agredirnos haciendo cálculos de poder personales que no sabemos si se concretarán. El pueblo reclama de su dirigencia opositora unidad, madurez, seriedad, herramientas y una agenda transparente y viable para lograr el cambio en el modelo político del país. No sigamos haciéndonos daños, ni fracturando la esperanza de millones de venezolanos que confían en cada uno de nosotros para gritar libertad.
Clever Lara
Secretario de Organización
Acción Democrática Aragua
@cleverlaraad