Familiares de José Antonio Rosales González, de 20 años, se sorprendieron al conseguir su cadáver dentro de su morada en el sector 35, en la parroquia San Isidro del municipio marabino, reseña el Diario La Nación.
Un funcionario de la Policía científica afirmó que los familiares comentaron desconocer las razones por las que Rosales habría muerto, puesto a que tenía desde la noche anterior sin contestar el teléfono. Uno de sus parientes se acercó hasta su vivienda a las 8.00 de la mañana del pasado martes a visitarlo, pero al no contestar sus llamados, procedió a entrar por su cuenta a la casa, encontrando el cadáver de José Antonio.
Según la fuente policial, el cadáver no presentó ningún tipo de herida por arma de fuego ni de armas blancas. Se esperan los resultados de la autopsia para conocer la causa de muerte.