El Instituto Nacional de Derechos Humanos de Chile (INDH) informó este sábado que intervino a favor de una joven costarricense, alumna de la Escuela de Carabineros de Chile, que denunció una violación en el establecimiento, además de otros malos tratos e internación médica forzada, reseñó EFE.
El INDH dijo en un comunicado haber recurrido de amparo (hábeas corpus) en favor de J.V.Z, de 23 años, ante el IV Juzgado de Garantía de Santiago, mientras la superioridad de Carabineros dispuso una investigación interna para establecer lo ocurrido en la Escuela.
La joven es funcionaria del Ministerio de Defensa de Costa Rica y viajó a Chile como becaria de la Escuela de Carabineros por un periodo de dos años.
El pasado 1 de julio, según la información del INDH, la aspirante a oficial de Carabineros se presentó ante su superior y denunció una violación por parte de un teniente instructor.
Ese mismo día, según la versión, se habría producido su intento de suicidio, por lo que fue llevada a la clínica de la Escuela y luego al Hospital de Carabineros.
Los hechos fueron comunicados el 5 de julio al embajador de Costa Rica, Manuel Rojas, quien al día siguiente visitó a la joven, en virtud de acuerdos bilaterales entre Costa Rica y Chile, señaló el INDH.
Desde esa fecha y hasta el 12 agosto funcionarios de la embajada costarricense mantuvieron contacto con J.V.Z, hasta que el 13 de agosto, por razones desconocidas y no comunicadas a la embajada de Costa Rica, fue trasladada a un centro médico siquiátrico privado ubicado en la comuna santiaguina de Lo Barnechea.
Desde entonces J.V.Z. estuvo incomunicada de su familia en Costa Rica, aunque recibió la visita el Cónsul General de su país tres días más tarde, sólo durante tres minutos. El diplomático dijo al INDH que la encontró fuertemente sedada.
Aún estaba en aislamiento y bajo fuerte sedación el 18 de agosto, cuando un abogado del INDH acompañado de una sicóloga forense la entrevistaron, luego de indicar a la dirección del recinto siquiátrico que, para efectos legales, la joven costarricense estaba privada de libertad y bajo custodia del Estado.
Allí pudieron constatar el estado de J.V.Z, que a pesar de estar con síntomas como ansiedad, expresó su voluntad de abandonar el centro médico. En la entrevista relató que era sedada cuatro veces al día, y que además había permanecido amarrada a su cama durante las noches, que había sido privada de alimentación y que era víctima de malos tratos.
Tras ello el INDH presentó el recurso de amparo y la joven fue visitada de la jueza del IV Juzgado, Carolina Araya, quien la entrevistó, constató las condiciones en que estaba y escuchó su voluntad de abandonar el recinto.
La jueza ordenó entonces su traslado al Hospital Psiquiátrico “Instituto José Horwitz Barak”, lo que se cumplió en la madrugada del 19 de agosto, siendo acompañada por profesionales del INDH y por el director del organismo, Branislav Marelic.
La dirección del hospital y los doctores tratantes comunicaron el 23 de agosto que J.V.Z. estaba recuperada, por lo cual el pasado 24 de agosto J.V.Z. declaró ante la Fiscalía, reiteró sus denuncias y el viernes 25 viajó de regreso a Costa Rica.
Además de la investigación que inició la Fiscalía a solicitud del INDH, también Carabineros abrió una investigación sumario ante la justicia militar, señaló el Instituto en el comunicado.