¿Quién va a firmar el primer contrato de más de 200 millones de dólares? ¿Cleveland reclutará una superestrella para contrarrestar a Golden State? La agencia libre comienza oficialmente el sábado y será histórica, cara y agitada.
AFP
La patada de salida para la “agencia libre”-el período en el que los jugadores fuera de contrato pueden volver a firmar o cambiar de equipo- se inicia el sábado a las 00:01 de la noche en Nueva York.
Pero algunos ya han tomado un paso de ventaja, como Houston Rockets, que logró una de las mayores transferencias del verano al conseguir al base estrella Chris Paul, en un intercambio con Los Angeles Clippers que involucró a siete jugadores, una selección de la primera ronda del Draft de 2018 y 661.000 dólares en efectivo.
Con Paul y James Harden en la nómina, Houston, eliminado en la segunda ronda de los playoffs de 2017 por San Antonio (4-2), quiere pelear a codo por el título 2018 contra Golden State y Cleveland, los dos pesos pesados que se han disputado las últimas tres finales de la NBA.
“La NBA está en plena carrera armamentística, en la que participas o miras desde el borde del campo. Con James Harden y Chris Paul en la flor de la vida, seremos capaces de competir con los grandes cañones del Campeonato”, resumió el gerente general de Houston, Daryl Morey.
Golden State y Cleveland son las referencias actuales de la NBA: su estilo de juego, su trayectoria y su política de contratación han sido buena parte de la clave de sus triunfos.
Danza de los millones
Un año después del sensacional fichaje de Kevin Durant, los Warriors han ganado dos de los últimos tres títulos de la NBA y tejido una cadena de 207 victorias en 246 partidos de temporada regular y sólo una derrota en los playoffs en 2017.
Se espera que Durant firme un nuevo contrato de 32 millones de dólares por sólo un año, que será actualizado para el verano de 2018, y dará más flexibilidad a los dirigentes de Golden State para enfrentar las contrataciones con vistas a la próxima temporada.
Los jefes de Golden State buscan premiar a la otra estrella de su equipo, Stephen Curry, que pese a su brillo jugó este año con un sueldo modesto de 12 millones de dólares para un jugador de su calibre, lejos de los 33 que devenga LeBron James.
El líder de los Warriors, nombrado mejor jugador de la NBA en 2015 y 2016, se espera firme un contrato por la friolera de 205 millones de dólares por cinco años, a razón de 41 millones de dólares por año, o 3,4 millones de dólares por mes.
Curry no debe ser el único en superar la cifra simbólica de 200 millones: también está en lista el superastro y MVP de la temporada de 2016-17, Russell Westbrook, que debe continuar su aventura con Oklahoma City.
La TV causa explosión salarial
Esta explosión de salarios, que se rige por un convenio colectivo negociado entre los dueños de los equipos y los representantes de los jugadores, también define un tope salarial por equipo estimada en 99 millones, y es impulsada por la entrada en vigor de los nuevos derechos de televisión.
La NBA ahora recibe 2.700 millones de dólares al año, frente a los 930 millones de temporadas anteriores.
Uno de los actores más importantes de la pretemporada será Cleveland, el campeón de 2016 que no pudo aguantar el empuje de Golden State y perdió la Final NBA por 4-1.
Si LeBron James y Kyrie Irving son inamovibles, los Cavaliers podrían equilibrar la cuenta traspasando a su pívot Kevin Love para reclutar a otra estrella.
Entre los jugadores que se codician figuran el alero Paul George, descontento por el rendimiento de los Indiana Pacers, que está también en el visor de los Lakers de Los Angeles.
Los Lakers buscan recuperar su gloria pasada ahora bajo la dirección de su nuevo presidente, la leyenda Magic Johnson.
También estará en el mercado de la agencia libre el astro de Utah, Gordon Hayward, perseguido por Boston, Kyle Lowry (Toronto) y Blake Griffin (Los Angeles Clippers).
Varios grandes nombres firmarán el que debe ser el último contrato de su gloriosa carrera, como Dirk Nowitzki (Dallas) y el español Pau Gasol (San Antonio), mientras que la leyenda argentina de los San Antonio Spurs, Manu Ginóbili, todavía tiene que anunciar si regresa para una temporada final, a sus 39 años y cuatro anillos de campeón.