Según el resultado de la encuesta de condiciones de vida para la población venezolana (Encovi), un 76 por ciento de venezolanos perdió un promedio de nueve kilos entre 2015 y 2016, pues solo comían una o dos veces al día y en la mayoría de las 6 mil 500 familias encuestadas, la ausencia de proteínas fue una constante.
Nota de prensa
Así lo explicó la nutricionista Ligia Ruíz durante su conferencia en la XII Jornadas científicas del Centro de Especialidades Médicas, de Maturín, quien amplió detalles sobre la situación nutricional del venezolano, al tiempo de brindar alternativas para paliar estos problemas de alimentación.
Además recalcó que la deficiencia de proteínas afecta a grupos vulnerables: pacientes con enfermedades crónicas, niños y adultos mayores, situación que genera problemas de crecimiento, problemas cognitivos en el caso de niños y en el caso de las embarazadas , partos prematuros o bebés de bajo peso y talla.
En la actualidad –destacó- el venezolano ha sustituido parte de lo que debe ser una alimentación balanceada, aumentando el consumo de tubérculos como yuca, ocumo, apio, batata y ñame. Muchas personas han consumido en exceso estos alimentos, desplazando las proteínas animales y vegetales como carnes y granos, por la relación costo valor y porque son de mas fácil acceso.
Para atender este déficit de proteínas, la nutricionista habló de opciones como los huevos, consumiéndolos al menos una vez al día sin que esto signifique un impacto para la salud. También planteó, combinarlo con caraotas y arroz que aportan gran valor proteico.
Para culminar, se refirió al trabajo de algunas fundaciones como Bengoa, la cual plantea como alternativa al menos una comida diaria con presencia de proteínas, mientras se supera la carencia de productos para contar con una alimentación saludable pues advirtió que esta contingencia no debe mantenerse por mucho tiempo porque las secuelas serán negativas incluso algunas irreversibles.