A través de la red social Facebook se pudo confirmar la identidad del sujeto encargado de llevar a cabo la primera “ocupación” de una panadería caraqueña.
En efecto se trata de José Solórzano, también conocido como “Yoda”, “un estudiante de pocas luces en la escuela de Historia de la UCV” del que no se sabe si terminó la carrera, cuya actividad extracurricular era “hacer capoeira en Plaza Cubierta”.
Afirman desde la red social que el remoquete de “tumbaestatua” le molestaba, a pesar de haber sido fotografiado en acción, “aupado por un señor que necesitaba atraer las cámaras del chavismo, Roland Denis”.
En la inesperada biografía afirman que “hizo política en la UCV con una gestión muy gris”, asimismo revelan que “cobraba dinero por varios ministerios, entre ellos, el de Educación Universitaria durante la gestión torpe de Samuel Moncada”.
Entre las revelaciones destacan que el panadero-tumbaestatuas “recibió formación política en Cuba”.
“Ha pasado de acabar con los bienes de la nación (patrimonios culturales) a los bienes o patrimonios de otros. Dignos ejemplos de un joven camarada y compatriota con la revolución, algo que Pedro Calzadilla seguramente pensaría y honraría con una medalla (o metálico)”, reseña la biografía.