Con una inflación de tres dígitos, recesión económica, escasez de bienes básicos y una oposición que intenta revocar al presidente Nicolás Maduro, el gobierno de Venezuela acogerá, desde el martes hasta el domingo, la XVII cumbre del Movimiento de Países no Alineados en la isla caribeña de Margarita, reseña Reuters.
Por Deisy Buitrago/Reuters
Maduro buscará que el evento, al que fueron invitados los 120 países miembros, sea una oportunidad para contrarrestar las acusaciones por su mal desempeño económico y represión a la disidencia.
“Venezuela se prepara para recibir la Presidencia del Movimiento de Países no Alineados (MNOAL), y aquí estoy yo, para recibir la antorcha y la bandera del MNOAL”, dijo Maduro días atrás. “Por eso es que el imperio tiembla y se desespera; no saben respetar la dignidad de los pueblos”.
Venezuela recibirá del presidente iraní, Hasan Rouhani, la presidencia pro tempore del grupo fundado en 1961, para conducirlo por los próximos tres años en base a sus objetivos de autodeterminación, no injerencia en los asuntos internos de sus naciones y la solución de conflictos sin el uso de la fuerza.
Por su parte, la oposición, que busca convocar a un referéndum revocatorio contra Maduro, espera que los países asistentes pongan especial atención en la crisis económica que atraviesa la nación OPEP, que ha llevado a miles a formarse en enormes colas para conseguir alimentos y medicinas.
“El pueblo está pasando hambre y la situación de los hospitales es deplorable, pero resulta que están trayendo contendedores de comida, no para el pueblo de Margarita, sino para la cumbre”, escribió el fin de semana el líder opositor Henrique Capriles en su columna semanal.
“Están montando un show que es una burla para los venezolanos”, agregó el dos veces candidato presidencial y principal promotor del revocatorio contra Maduro.
Una de las acciones que más comentaron los venezolanos en los últimos días fue la divulgación, por parte de un medio local, de fotos de una estatua de bronce del fallecido presidente Hugo Chávez que sería desvelada durante la cumbre. La efigie sería la primera del líder socialista.
Sin armas, ¿con cacerolas?
Nacido en Belgrado, ex Yugoslavia, en 1961, el MNOAL proporcionó una alternativa para las naciones que no apoyaron a Estados Unidos o la Unión Soviética durante la Guerra Fría. Sin embargo, tras la caída del muro de Berlín, en 1989, su relevancia ha disminuido significativamente.
De hecho, países latinoamericanos como Perú, Colombia o Chile no han confirmado su asistencia y los líderes de India, Corea del Norte, Egipto, Arabia Saudita, Vietnam, entre otros, no eran esperados.
A la cumbre previa, en Teherán, asistieron únicamente 35 de 120 presidentes, reyes o primeros ministros.
En un intento por mantener el orden y evitar protestas, el Gobierno prohibió el porte de armas, los vuelos privados y bloqueó el traslado a la isla de miembros del parlamento, de mayoría opositora, que pretendían celebrar una sesión a metros de la cumbre.
Sin embargo, ello no detendría el descontento con el mandato de Maduro, cuyos detractores hicieron hace dos semanas retumbar sus cacerolas mientras el gobernante -con una aprobación que cayó a 21 por ciento en julio- recorría un urbanismo de Margarita.
“Estamos enojados al ver cómo malgastan el dinero de la nación para fingir una falsa normalidad”, dijo Nathalie Gómez, una trabajadora de un hotel en Margarita. “Nuestros niños no beben leche y la gente come una o dos veces al día, mientras los políticos piden el mejor champán y vino en sus banquetes”.