“Suspendida la consulta. No se administrará quimioterapia hasta nuevo aviso. Vaya a la dirección”. Así reza un papel pegado en la puerta del consultorio de Hematología del hospital general de El Tigre, Felipe Guevara Rojas.
El jefe de ese servicio asistencial, Fernando Guevara, informó que decidieron paralizar la atención a los pacientes hemato oncológicos, debido a que “a que el calor dentro del cubículo es insoportable”.
Guevara explicó que el problema de climatización persiste desde comienzos de año, pero se cansaron de esperar soluciones por parte de las autoridades sanitarias.
“No podemos trabajar bajo esas condiciones, yo le he pedido a los pacientes que vayan a la dirección (del hospital) y protesten para que les resuelvan el problema”, dijo.
El especialista agregó que dejarán de atender entre 15 y 20 pacientes diarios, de los cuales unos cinco corresponden a quimioterapias por padecer de enfermedades hemato oncológicas como leucemia, linfomas y los mielomas.
Indicó que en el consultorio de Hematología reciben pacientes, no solo de la zona sur, sino de Anaco, El Socorro (estado Guárico) y hasta de Aragua de Barcelona porque el servicio del hospital Razetti tampoco funciona.
Debido a la suspensión, apuntó que tampoco atenderán a personas con anemia, anemia depranocítica y púrpura trombocitopénica (trastorno de coagulación).
Lamentó que las autoridades hospitalarias y de Saludanz no respondan.
En manos de Dios
En medio del calor, algunos pacientes recibieron ayer la última quimioterapia. Lisbeth de Manzanares, dijo que cada dos meses necesita hierro por un cuadro de anemia crónica, pero la suspensión le afectará. “El doctor nos dijo que no pasará mas consulta por el calor y la falta de medicamentos”.
Agregó que no hay otro lugar en El Tigre donde pueda continuar con el tratamiento. “Esto es terrible, debemos organizarnos para pedir una solución al hospital”.
Neylett Contreras, madre de un niño de 10 años con leucemia linfoblástica aguda, expresó que él necesita su quimioterapia semanal. “Esto es una preocupación”.
Deilys Ruiz, progenitora de un varón de cuatro años, dijo que recibió con angustia la paralización de la consulta porque cada 21 días su niño recibe la quimio. “Vivimos en la población de El Socorro y pago 18 mil bolívares a un transporte para venir hasta el hospital de El Tigre para que le den su tratamiento. No sé para dónde voy a agarrar ahora”.