En las últimas semanas se han recrudecidos los saqueos a comercios y camiones, además de la fuerte represión ejecutada por los cuerpos de seguridad del Estado que ya ha costado varias personas fallecidas, al respecto desde la Asociación de Trabajadores Emprendedores y Microempresarios condenan todo tipo de violencia pero afirman que esta realidad es fruto de la ineficiencia del Gobierno nacional.
Nota de prensa
Alfredo Padilla, director general de Atraem, explicó que la razón principal de estos hechos condenables es la escasez y el hambre, lo cual genera un clima de angustia en la ciudadanía que no consigue los alimentos. “Para nosotros existe una especie de bolibandalismo, promovido desde el Gobierno que en palabras del Chávez que expresaba si usted tiene hambre robe, asimismo se organizan colectivos que controlan territorios donde ellos son la única ley y son protegidos por el propio Estado. Esta combinación fatal es el motor de los saqueos”, dijo.
Padilla calificó de desproporcionada la represión ejecutada por los cuerpos de seguridad del Estado, los cuales ya han dejado víctimas fatales, recalcando que estos sucesos han ocurrido desde la capital del país hasta en lugares recónditos. “Esto es producto de un clima de hambre y escasez, pero el Gobierno comete el error de partidizarlo achacándole la culpa a factores de la oposición, cuando esto es completamente falso”.
Señaló que la respuesta del oficialismo es el lema “Todo para los Clap”, recordando que el control de este organismo es dirigido por militantes del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV). “Es inaudito que el sistema de distribución de comida dependa de la voluntad de un partido político, cuando existe un canal natural ejecutado por los trabajadores por cuenta propia a través de los mercados municipales, la bodegas de los barrios y hasta la economía informal legalmente autorizada por las alcaldías. Todo esto es dejado de lado para ser sustituido por los llamados Clap”, expresó.
Indicó como un error que el Gobierno de Nicolás Maduro decidiera que la distribución de alimentos seria 70% para los Clap y 30% en los supermercados, anulando totalmente al trabajador de los mercados y a la economía informal legalizada. “Esta nueva organización no es la solución a la escasez sino que le arrebata el trabajo a quienes laboran en los mercados, por esta razón condenamos los saqueos pero exigimos que se respete el derecho de los emprendedores que por años, incluso desde la colonia, han distribuido la comida al pueblo más humilde”.