El ex gobernador de Florida, Jeb Bush, anunció el sábado su retiro de la contienda por la candidatura presidencial republicana.
AP
Jeb Bush puso fin a su participación en el proceso interno republicano en el que a pesar de captar formidable apoyo financiero de donantes, no logró atraer a los electores airados con Washington ni a los recelosos de enviar a otro miembro de la familia Bush a la Casa Blanca.
Bush, con ojos algo llorosos, dijo estar orgulloso de la campaña que había emprendido para unificar al país e impulsar soluciones conservadoras.
El hijo y hermano de los ex presidentes George H.W. Bush y George W. Bush se había sumado en junio a la contienda interna republicana y suscitó grandes expectativas, a las que había alentado con gran recaudación de fondos.
Sin embargo, Bush bajó rápidamente en las encuestas frente a algunos de sus contrincantes republicanos más extrovertidos, como el multimillonario Donald Trump y el senador de Texas, Ted Cruz, quienes se habían presentado como alternativas contrarias a la corriente política principal frente al favorito inicial.
Después de los malos resultados que tuvo en Iowa y New Hampshire, Bush fincaba esperanzas en South Carolina, un estado en el que el apellido ha conservado cierta influencia.
Sin embargo, Bush no terminó entre los tres primeros en South Carolina. De mantenerse en la contienda, podría haber afrontado las exigencias de líderes del Partido Republicano y de donantes de que se retirara.