Un niño de 12 años sigue recuperándose en un hospital de Jacksonville, en la costa noreste de Florida, de las heridas que le infligió en una pierna un tiburón que le atacó el domingo pasado mientras jugaba en la orilla del mar. EFE
Josh Bitner Jr. jugaba en Fernandina Beach, con el agua a la altura de la cintura, y en el momento en que les enseñaba a sus padres una gran concha que había encontrado sintió que “algo” le agarraba la pierna y “tiraba de ella”, de acuerdo con la información del diario The Florida Times-Union.
Bitner Jr., oriundo del estado de Georgia, comenzó a pedir ayuda, un grito de socorro que su padre creyó que era una broma, y a continuación el escualo volvió a atacarle, según contó a los medios en su cama del hospital UF Health Jacksonville.
Se trata del primer ataque de tiburón registrado en Fernandina Beach este año, aunque el total de ataques contabilizados desde junio pasado en el noreste de Florida asciendo a siete.
El muchacho fue tratado por facultativos en la playa y trasladado al hospital, donde las heridas requirieron varios puntos de sutura, aunque el chico se encuentra en buen estado.
Bitner explicó que se defendió instintivamente del tiburón agarrándole una parte de la aleta superior y golpeándole.
El Archivo Internacional de Ataques de Tiburón informa de que en lo que va de 2015 ha habido 16 ataques de escualos en Florida.