El Consejo de la Federación (Senado) de Rusia solicitó hoy a la Fiscalía General y los ministerios de Justicia y Asuntos Exteriores investigar a doce ONG extranjeras que tienen como objetivo “influir en la situación política interna” del país, según la petición, reseña EFE.
La mayoría de las ONG incluidas en esa relación, denominada por su promotores “‘stop-list’ patriótica”, están vinculadas a Estados Unidos, como Open Society Institute (Fundación Soros), Freedom House o National Institute for International Affairs.
“Todos nosotros, incluidos los legisladores, debemos crear mecanismos de defensa de la estabilidad política y de la soberanía de Rusia”, declaró a un grupo de periodistas la presidenta del Senado, Valentina Matvienko, al comentar la iniciativa.
La elaboración de este tipo de listas, agregó, es una reacción a los nuevos esquemas que idean las fundacionesextranjeras para eludir la legislación rusa.
“No lo podemos permitir. Tenemos que crear mecanismos para defender nuestra seguridad nacional”, enfatizó Matvienko.
De las doce ONG incluidas en la “‘stop-list’ patriótica”, siete son estadounidenses, tres ucranianas y dos polacas.
Según los senadores, gran parte de estas ONG, financiadas por otros Estados, realizan sus actividades desde el extranjero, mediante intermediarios, y a través de sus oficinas en Rusia.
De ahí que “se necesite informar oportunamente a la opinión pública de los riesgos que implica colaborar con ellas, así como supervisar permanentemente la eficacia del mecanismo jurídico que contempla la legislación vigente”.
El pasado 24 mayo el presidente de Rusia, Vladímir Putin, promulgó una ley que permite declarar “indeseables”, sin mediar decisión judicial, a las ONG extranjeras e internacionales que representen una “amenaza para las bases el orden constitucional del Rusia, su capacidad defensiva y seguridad”.
De acuerdo con la normativa, la decisión de incluir a una ONG en la categoría de “indeseables” es prerrogativa del fiscal general de Rusia o de sus adjuntos, que deben acordar la medida con el Ministerio de Asuntos Exteriores.
La ley prohíbe todo tipo operaciones financieras con las ONG declaradas “indeseables”, que tendrán que poner fin a sus actividades en el territorio de la Federación de Rusia, y contempla multa para los ciudadanos que colaboren con ellas.
En 2012, Rusia aprobó una normativa por la que las ONG rusas que recibían financiación del exterior deben inscribirse en un registro como “agentes extranjeros”.
Según organizaciones de defensa de derechos humanos tanto rusas como internacionales, las regulaciones draconianas de las actividades de las ONG adoptadas por las autoridades de Rusia apuntan a impedir el desarrollo de la sociedad civil en el país. EFE