Pero la pregunta es, ¿Qué representa este cambio en las barreras de entrada a un mercado para la política de una ciudad? Es algo muy complejo pero lo simplificaré a un punto específico, las ciudades que sean capaces de promover y atraer de manera efectiva el emprendimiento joven, serán aquellas que progresen por encima del resto.
La batalla por ser la “Meca del Emprendimiento en Latinoamérica” es una a la que Caracas y el país completo entra tarde, lo cierto es que el Estado se ha convertido en el principal enemigo de la iniciativa privada poniendo como modelo de sociedad al socialismo retrogrado, cuyo objetivo es tener ciudadanos dependientes del Estado sin capacidad de soñar.
Sin embargo no todo está perdido, hay muchos ejemplos en el mundo de cambios drásticos y exitosos en naciones que venían de procesos similares como es el caso de Chile, país que hoy es una de las incubadoras de emprendimiento más importantes del mundo. Esta política se llama “Star-up Chile” y ha logrado generar un ecosistema de innovación empresarial cuya base está en Santiago, dándole la oportunidad a emprendedores de todo el mundo de viajar a Chile durante 6 meses a desarrollar su idea de negocio, teniendo como incentivos un capital semilla, un espacio de oficinas, apoyo académico y acceso a las redes económicas del país para aprender, compartir conocimientos y por supuesto hacer negocios. En este proceso los participantes tienen como deber compartir parte de sus experiencias a través de charlas, workshops y actividades de impacto social con estudiantes y emprendedores locales.
Caracas debe imponerse y aprender de experiencias como la chilena porque se tiene el recurso humano para hacer este sueño posible. Venezuela a pesar de todo lo que padece, logró posicionarse en el puesto número 11 del Monitor Global de Emprendimiento del 2012 (no se incluyó en el índice de 2013 ni 2014), con un porcentaje de 15,4% de su población pensando en nuevas iniciativas empresariales de distintas escalas. Es decir, está en nuestra cultura el progresar, salir adelante y alcanzar nuestros sueños. Si aplicamos modelos similares al chileno y creamos un marco legal, que no sea una máquina de impedir sino que otorgue libertad a los nacientes empresarios de nuestra ciudad para trabajar, podremos convertir a Caracas en la ciudad emprendedora por excelencia en la región.
Jesús Armas es Concejal del Municipio Libertador