Que en el país un simple ventilador de pie costara en enero pasado 15 mil bolívares y este mes de junio ya se venda por Bs. 45 mil refleja seriamente parte del actual problema económico que atraviesan los venezolanos, así lo informó Panorama
Nancy Faría Lugo
Esta fuerte aceleración de los precios, según expertos, tendría sus raíces en la continua postergación de medidas económicas gubernamentales, lo que nutre la inflación nacional, aderezada de la escasez de dólares oficiales, un voraz “dólar paralelo”, un control de precios que espera por la modificación de ley y la amenaza de aumento en la gasolina.
Cada uno de estos indicadores se ven —hasta ahora— con claridad en el bolsillo del ciudadano, quien vive la merma del poder adquisitivo debido a que las cifras oficiales son una deuda pendiente del Banco Central este año.
Los índices de inflación, escasez o PIB que se manejan son los del 2014, cuando cerraron en 68%, 70% y -3%, respectivamente.
Lo que sí ha ocurrido en este primer semestre es que se creó el Simadi con tasa cercana ya a Bs. 200 por dólar, junto a Cencoex a Bs. 6,30 y Sicad a Bs. 12, que tienen de enemigo al paralelo que sobrepasa los Bs. 400. Sin embargo, de precios y gasolina solo se ha hablado.
Elías Matta, diputado a la AN y miembro de la comisión de Finanzas, cree que antes de visualizar el segundo semestre del año se debe revisar el primer lapso “en el que no tenemos cifras de inflación, pero todo indica que sobrepasa el 40% acumulado y hay quienes hablan de 50%, y para el cierre del año estaría en torno al 150%”.
“Las reservas internacionales están en el nivel más bajo, en los últimos tres meses perdimos 6.800 millones de dólares, y estamos en 17.600 millones de dólares, niveles del año 1997”, acotó.
“En tercer lugar está la locura del dólar, porque no hay ningún tipo de dólar oficial, el que se encuentra es el paralelo que anda rondando los 400 bolívares y esa es la triste realidad, el Simadi es una ficción, el de 12 quedó para el recuerdo y el de 6,30 es para que unos vivos”.
“Lamentablemente, si el Gobierno sigue con la parálisis que tiene, si no toma decisiones, en economía siempre sigue algo peor”, acotó.
Con lo que coincide Carlos Ramones, profesor de economía de la Universidad del Zulia, quien dice que “hay que tomar medidas económicas para equilibrar la macroeconomía venezolana”.
Mencionó que no conocer nada sobre las cifras oficiales en el primer semestre genera mayor preocupación ante el segundo lapso del año, porque la consecuencia mayor serían altísimos niveles de inflación y de escasez.
El especialista criticó al BCV, porque esa posición genera mayor incertidumbre y en economía eso crea una percepción de situación muy difícil.
En su opinión, urgen políticas macroeconómicas como acabar con la emisión de dinero inorgánico, eliminar las divisas a Bs. 6,30, erradicar el contrabando, bachaqueo y corrupción, asumir medidas fiscales y no fiscales, y sobre todo la reactivación industrial.
Para el nuevo presidente de Fedecámaras Zulia, Carlos Dicskon, “son los indicadores los que permiten a los agentes económicos proyectar su participación en un país”.
No manejarlos, continúa, “no permite proyectar los ejercicios de negocio, produce mayor inflación por que no permite hacer las correcciones de precio ajustadas a la realidad, sino a un supuesto incierto”.
Mientras tanto, se viene el segundo semestre del año, el de más consumo, el que demanda más divisas, el que perfilará un cierre de año de decrecimiento.