Manuel Corao: Entre la denuncia y la Justicia

Manuel Corao: Entre la denuncia y la Justicia

thumbnailmanuelcoraoCuando el medio de comunicación impreso de España ABC informo acerca de la presencia de un miembro de custodia de Diosdado Cabello en la capital norteamericana declarando en torno a las actuaciones de este alto funcionario del estado; muchos pensaron que era un cuento u olla periodística para distraer a los españoles de los males económicos y sociales heredados del gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.

No solo era cierta tal afirmación; con lujos de detalles, rango, posición, trayectoria, elementos probatorios, aporte a otras pesquisas y testigos, un ex edecán del barines enfrenta las corruptelas. El teniente de corbeta de la fuerza naval Leamsy Salazar Villafaña luego de viajar a la península Ibérica previo contacto con delegados norteamericanos, se trasladó a la potencia para exponer su versión .

Proveniente de Washington y otras fuentes, surge ante la opinión publica por iniciativa del medio que luego fue secundado por otros rotativos y repetidores audiovisuales, las dudosas actuaciones a quien se considera el número dos del poder en la cuna de Bolívar.





Para entender la razón de la crisis actual debemos retrotraernos al inicio del septenio de Hugo Chávez en 1,999 para conocer el deterioro sistemático de las relaciones con la administración en la lucha contra el narcotráfico a través de la DEA.

Desde el inicio del periodo presidencial a las unidades de patrullaje aéreo del buró se les limita inexplicablemente las habituales incursiones desde territorio patrio.

La vaguada de Vargas en diciembre del noventa y nueve y sus lamentables consecuencias deja al descubierto la verdadera intención de Hugo Chávez; distanciarse de los norteamericanos como aliado y seguro proveedor de crudo.

Ante tal calamidad USA ofrece un hospital naval y trasladar contingentes de ingenieros, técnicos y obreros para prestar asistencia sanitaria a los afectados como ayuda para reponer los servicios básicos afectados.

En 2000 Chávez justifica ante sus llegados internos de política exterior un tanto extrañados de tal decisión
“Fidel Castro me dijo que la verdadera intención con tal ayuda era invadir Venezuela”.

Para esa época ya se comentaba en los medios de comunicación social sobre las andanzas del actual gobernador de Guárico capitán Ramón Rodríguez Chacín en los predios de la FARC y el ELN a espaldas de las autoridades bogotanas.

Durante la primera década del siglo medios neogranadinos dieron a conocer reclamos formulados por Bogotá a Caracas sin recibir respuesta. 2008 es un período destacado al saber de buena tinta se incautan a las FARC lanzacohetes AT-4 comprados por Venezuela.

Los ordenadores despojados a Raúl Reyes, del Secretariado de las FARC, en Ecuador en acción militar colombiana dan fe cierta de la relación Hugo Chávez con la guerrilla.

A los acontecimientos de abril del 2002 cuando Chávez abandona el poder temporalmente le suceden otros episodios. En 2005 el jefe de estado solicita la extradición de Luis Posada Carriles sin logar tal requerimiento.

Desde Miraflores el pie Montañez suspende el acuerdo de lucha antinarcóticos bajo la no comprobada revelación de un golpe de estado para dar al traste con el mandato conferido, por los agentes anti tráfico ilegal de narcóticos.

A partir de ese lapso las maniobras fuera de la ley en la geografía caribeña se multiplican día a día. La región que se caracterizó en limitado corro de estupefacientes llega a ser almacén seguro de la droga y residencia de cabecillas.

Con la acusación, persecución en el 2009 y detención de Walid Mackled queda en evidencia la existencia de una mafia conocida públicamente desde entonces como “El cartel de los Soles”.

Actualmente mas de diez personas y siguen han prestado testimonio ante una comisión de fiscales en Nueva York y un grupo comando antinarcótico sobre tal cartel.

De no tomarse acciones ejemplarizantes en NN.UU y la OEA , Venezuela quedará como reducto de malandrines y seres del mal vivir que atentarán en otras latitudes.

Mientras Cabello ordena a la justicia lisonjera prohibición de salida del país de 22 directivos de medios de comunicación social; valientes editores independientes norteamericanos, españoles y en Venezuela profundizan mediante denuncia e investigación el narcotráfico, la corrupción y violación de los derechos humanos que ayuda a las autoridades actuar en pos de justicia para todos.

No basta el descargo de micrófono, se espera la presencia de los indiciados en USA para defender su inocencia ante magistrados probos. ¿Vendrán?