La escasez de motos y repuestos está cobrando cada vez más vidas en las calles de la violenta Venezuela, reseña un reportaje de la agencia Reuters.
Cada semana, unos 600 motociclistas son asaltados a punta de pistola en el país petrolero, y 55 han perdido la vida en lo que va del año, según estadísticas de un gremio que agrupa, al menos, a cuatro millones de motoristas.
“Nos están matando a los que estamos en la calle para robarnos la moto porque no hay ni repuestos”, dijo a Reuters Jorge Montaño, portavoz de la Federación Nacional Socialista de Motorizados de Venezuela, simpatizante del Gobierno.
El problema ha ido en crecimiento, reconoció, aunque no suministró cifras comparativas de años anteriores sobre los asesinatos a motociclistas.
En medio de una recesión económica que se ha agravado con los bajos precios del petróleo, el ensamblaje de motocicletas se desplomó en Venezuela y, con ello, su venta que apenas llegó a 168.802 unidades en el 2014 desde las 513.205 del 2013, según registros de la Asociación de Fabricantes de Motocicletas.
El gobierno socialista, que promovió el ensamblaje de millones de motos con piezas traídas de China, ha cortado drásticamente la entrega de divisas al sector dentro del control cambiario que acumula más de una década.
“La situación está empeorando”
Detrás de Honduras, Venezuela es el país más violento del mundo con una tasa de 57,6 homicidios por cada 100.000 habitantes, de acuerdo a cifras de Naciones Unidas.
La inseguridad, junto con la elevada inflación, están entre los problemas que han golpeado la popularidad del presidente Nicolás Maduro, según las encuestas.
Y ahora al asesinato descontrolado de policías se le une el de motoristas, imprescindibles para hacer recados rápidos y movilizarse entre el caótico tráfico en las principales ciudades, como Caracas.
“Mujeres bien bonitas se prestan para el robo. Te piden una carrera y cuando llegas al sitio está el ladrón esperando para robarte la moto”, comentó Montaño sobre uno de los modus operandi relatados por miembros de su gremio.
“A veces los compañeros no quieren dar la moto y les dan tiros en las piernas o los matan”, agregó.
El líder sindical dijo que los motoristas organizados han solicitado al presidente Maduro que les permita importar piezas de China para comercializarlas directamente en Venezuela.
A pesar de estar interesado en el planteamiento, según Montaño, aún no se han hecho anuncios concretos.
Reuters no obtuvo respuesta de representantes del Gobierno para ahondar sobre la medida.
Entretanto, motociclistas que trabajan como taxistas en las calles de Caracas dicen que toman cada vez más precauciones para evitar el robo, como regresar más temprano a casa y tener cuidado mientras esperan en semáforos en rojo.
“La situación está empeorando”, dijo un mototaxista en Caracas que ya fue víctima de robo a mano armada. “Aquí se vive la vida minuto a minuto”, agregó.
Por Corina Pons/Reuters