En un lugar de la costa de Brasil, dos turistas estadounidenses se preparan para adentrarse por el Río Amazonas en dirección a la frontera con Venezuela. Lo que ocurrirá cuando lleguen allí, no obstante, podría ser la verdadera aventura, publica El Nuevo Herald.
Durante la última semana y media, Venezuela ha impuesto abrupta y desordenadamente nuevos requisitos de visa para los turistas de Estados Unidos. El presidente Nicolás Maduro hizo primero el anuncio el 28 de febrero, y la ley se publicó el 3 de marzo, pero hasta hace poco algunas de las embajadas venezolanas habían estado diciendo que no tenían la documentación necesaria para dar las visas.
El nuevo obstáculo ha tomado por sorpresa a la comunidad empresarial y turística.
Tucan Travel, radicada en Londres, organiza viajes atravesando Brasil y Venezuela hasta Colombia. Dos de los viajeros del grupo actual son de Estados Unidos, dijo Jess Millet, directora de comunicaciones de la organización.
“Algunos de los clientes estadounidenses empezaron a viajar desde Quito, Ecuador, en noviembre, y apenas les informaron el sábado sobre los cambios del visado”, dijo.
Incluso si pudieran acudir a un consulado, la embajada afirma que podría demorar hasta 90 días para procesar un visado. De modo que los dos viajeros “decidieron que iban a arriesgarse a llegar a la frontera”, dijo Millet.
American Airlines, que tiene dos viajes al día de EEUU a Caracas y cinco a la semana a Maracaibo, ha estado notificando de los cambios a sus clientes, y además dándoles la oportunidad de cancelar o cambiar sus viajes sin costo para ellos, afirmó la compañía.
Pero otros no han tenido la misma suerte. Paul Stanley, de Angel-Eco Tours en Venezuela, hace viajes al Salto del Angel (el más alto del mundo) y el Parque Nacional de Canaima. El dijo que algunos de sus clientes solamente se habían enterado de los requisitos de la visa cuando fueron a abordar sus vuelos en Estados Unidos.