El coordinador nacional de Voluntad Popular, Carlos Vecchio, escribió una carta dirigida a Leopoldo López a un año de su encarcelamiento en la cárcel militar de Ramo Verde, donde reafirma su compromiso con la construcción de #LaMejorVzla, la de Paz, Bienestar y Progreso.
Para Vecchio el discurso de López ese 18 de febrero sigue vigente. Manifiesta que hoy se mantienen las razones de lucha “hoy hay muchas más razones para continuar. Esas ideas, esos sueños no están presos, ni fuera de Venezuela, cada día recorren nuestro país y vibran en el corazón de cada venezolano. Esta dura prueba que nos ha puesto la vida, (pero mucho más difícil y dolorosa en tu caso), ha reafirmado la profundidad de tus convicciones y el compromiso que tienes con tu patria”, expresó.
A continuación trascribimos la carta completa de Carlos Vecchio desde su exilio a Leopoldo López en la cárcel militar de Ramo Verde.
“Para: Mi Hermano en Ramo Verde
De: Tu hermano en el exilio
Hermano, quizás por un momento quien lea esta carta pudiera pensar, por su destinatario y remitente, que la misma fue escrita en la Venezuela de los años 50, la época de la dictadura en blanco y negro. Tristemente debemos advertirle que se trata de una carta escrita hoy 18 de febrero de 2015. Ha pasado un año de tu prisión en Ramo Verde, y casi 8 meses de mi exilio. En pleno siglo XXI se nos persigue por pensar distinto. Por expresar nuestras ideas. Por soñar con una mejor Venezuela.
-Si hace un año teníamos razones para luchar, hoy hay muchas más razones para continuar. Esas ideas, esos sueños no están presos, ni fuera de Venezuela, cada día recorren nuestro país y vibran en el corazón de cada venezolano. Esta dura prueba que nos ha puesto la vida, (pero mucho más difícil y dolorosa en tu caso), ha reafirmado la profundidad de tus convicciones y el compromiso que tienes con tu patria. Tu infame encarcelamiento te ha convertido en un referente moral en el país, precisamente en un momento que tenemos un régimen inmoral que temporalmente detenta el poder. Esos ejemplos de coraje, compromiso, sacrificio que nos vienes dando, siguen despertando al pueblo de Venezuela. Se equivocaron aquellos que pensaron que con tu encierro físico podían parar tu espíritu de lucha. Por el contrario, lo han potenciado. Así son los rebeldes. Así son los líderes.
No solo siento orgullo de ser tu hermano, sino tu hermano político. Así como siento orgullo de la familia que te acompaña, quien no te ha dejado un momento solo. Muy por el contrario, se ha convertido en pilar fundamental de tus acciones. Aún recuerdo las noches previas a tu aparición pública los difíciles momentos que tuve con ellos al comunicarle tu decisión. Hoy les pido perdón. Si perdón, porque sí bien entendía su preocupación y su dolor, hoy mi primer hijo me ha hecho sentir en carne propia el amor eterno e infinito de los padres para con sus hijos. Así que hermano, siéntete orgulloso de los padres que tienes, y de la esposa que te acompaña. Tienes que sentirte orgulloso de los estudiantes que nos siguen inspirando, tienes que sentirte orgulloso del partido que hemos venido construyendo, tienes que sentirte orgulloso del resto de los presos políticos y sus familias que como tú siguen luchando, tienes que sentirte orgulloso de nuestro pueblo que ya decidió cambiar.
Has contribuido para que nuestro pueblo entienda que esa expresión “tenemos patria” es una estafa a nuestros hermanos venezolanos. Patria no es una expresión, no es una marca como lo pretenden hacer ver. Patria “son tantas cosas bellas”, como diría nuestro hermano latinoamericano Rubén Blades. Patria es la unión de nuestro pueblo sin importar sus ideas políticas, patria es vivir en paz sin que nos asesinen, patria es progresar sin dejar a nadie atrás, patria es contar con salud digna, patria es tener un pueblo educado, patria es poder llevar a casa lo que necesitamos para vivir, patria es sentirla cerca aun estando lejos, patria es tener una justicia que pueda juzgar sin importar tu color político, es tener gobernantes honestos y no mafiosos. En fin, Patria son tantas cosas buenas y no es lo que hoy tenemos. Debo confesarte que el día que forzosamente tuve que salir de mi tierra, lloré. Sí, lloré. No podemos decir que amamos a nuestra tierra sino la lloramos, sino la sentimos. Pero ese momento me marcó para reafirmar un mayor compromiso para lograr la patria que merecemos. Y estoy convencido que ese es el compromiso que tú tienes estando en Ramo Verde.
Cada día está más cerca el momento que nos volvamos a encontrar. Y cada día está más cerca el momento que volvamos a recorrer Venezuela para construir la patria que merecemos hoy y para siempre. Cada día está más cerca la Mejor Venezuela.
Venezuela vale la pena, que Dios nos siga acompañando en esta lucha.
Tu hermano en el exilio
Hoy la patria la siento más cerca porque la llevo en el corazón”.