Miss Venezuela, Migbelis Castellanos, contó todo lo que pasó con su peso y su vestido durante la elección del Miss Universo. “Créanme que no fue por los kilos, tenía que pasar y punto”, dijo tajante, la zuliana, de 19 años, vía telefónica desde Miami, con Venevisión. Por lo pronto seguirá en Estados Unidos junto a su familia para unas “cortas vacaciones”, y después iniciará una “nueva etapa”.
“Yo quiero contar todo lo que pasó con mis vestidos. Es mentira que a uno de ellos se le rompió el cierre. Y también quiero aprovechar para agradecer a todo el equipo de Alejandro Fajardo. Se esmeraron en hacerme dos vestidos preciosísimos. Uno lo usé para el ensayo con vestido antes del evento, se veía muy bien pero era muy transparente y todos los cristales que tenía me arañaban mucho el cuerpo y entonces era un poco incómodo a la hora de caminar, por eso estuvo descartado. El otro vestido de Fajardo, la parte de abajo me hacía muy difícil caminar, y con mi experiencia en el Miss Venezuela sabía que lo más importante era estar tranquila y seguridad para bajar las escaleras”, precisó.
Sobre los dos trajes confeccionados por el diseñador zuliana Nidal Nouaihed comentó que “uno de color verde muy bello, lo usé para asistir a una subasta benéfica y había otro dorado que también era una opción para la noche final, pero ya habían otras niñas vestidas de dorado. Entonces tenía la opción de los vestidos de Gionni Straccia; el blanco que usé en la preliminar y el rojo que llevé en la elección. Y sabía que ya lo había usado Irene Isser, pero ella no era la que iba a salir a desfilar. El señor Osmel (Sousa) siempre estuvo pendiente de mí durante las tres semanas que estuve en Miami. Y en la noche anterior del concurso él me dijo dos cosas, uno que no saliera con tanto cabello y dos, que usara el vestido rojo. Sé que es un tema delicado para todos los fanáticos, para todos los venezolanos, porque piensan que por el vestido no gané, pero no es así señores. Si vas a ganar, uno gana con un vestido rojo, con uno verde, azul”.
Reiteró que Sousa como la profesora de pasarela Giselle Reyes “estuvieron pendientes de todo”. “El señor Osmel me dijo que lo mejor para mí era usar el vestido rojo y, aprovecho para decirle a la gente que piensa que me hizo una maldad, que eso no fue así. Ustedes no saben qué es lo que se siente de decir que quedaste entre las 10 mujeres más bellas del universo”.
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