La crisis económica desatada por la escasa adjudicación de divisas está condenando a la muerte a un sector acostumbrado a crecer. Las agencias de viaje durante el año 2014 registraron el peor récord de su historia. Las que funcionan en Carabobo reportaron una caída del 55% en sus ventas. De no mejorar las condiciones en 2015 muchas bajarán sus santamarías de forma definitiva, publica El Carabobeño.
Están en período de supervivencia. En la mayoría se ha despedido al personal y la atención la hacen de forma directa sus dueños. Otras han tenido menos suerte. Al no poder facturar lo necesario han cesado sus actividades. 10 oficinas de este tipo integran esa desafortunada lista en el estado.
Angelina García, presidenta de la Cámara de Turismo de Carabobo, relató que la situación se ha generado principalmente porque además de la reducida disponibilidad de asientos, las líneas aéreas han optado por vender los pasajes de forma directa. La mayoría lo hace bajo la modalidad online, a través de sus páginas web, donde solo admiten el pago en dólares.
Para exigir que se respeten los canales de distribución y exponer el incremento de casos de fraudes en los boletos, un grupo de 30 personas representantes de diferentes agencias de viaje del país, entre ellas seis de Carabobo, entregaron en el Ministerio de Turismo un documento donde se expone toda la problemática del sector. Esperan que se apliquen los correctivos en un corto plazo.
Cierre negativo
El sector cerrará el año 2014 con cifras negativas. No hay ningún número alentador. La deuda se mantiene por el orden de los tres mil 500 millones de dólares. Mientras eso persista la normalidad no retornará.
Adicionalmente el 50% de la flota de aviones se encuentra paralizada por falta de repuestos. Según indicó García, hay costos que se deben cancelar en dólares como los seguros de los aviones y las certificaciones de los pilotos. Pero el problema más grave lo representa la imposibilidad de adquirir los repuestos para las unidades, que únicamente los venden en otros países. Las líneas aéreas deben mantener un inventario para poder garantizar los vuelos. Los aviones no son como los carros, se deben chequear constantemente. Si tiene desgaste de alguna pieza se debe reemplazar aunque no esté mala por completo porque no se puede correr el riesgo que se dañe en el aire.
Esto ha provocado que la mayoría de los pocos paquetes que las agencias de viaje pudieron vender a principio de año “se cayeran” por la suspensión de un importante número de vuelos. El caso más emblemático y reciente en la región fue la eliminación del vuelo de las 3 pm que salía desde el aeropuerto Bartolomé Salom de Puerto Cabello hacia Porlamar. Hasta ahora la línea ha garantizado que los pasajeros podrán volar desde Valencia, pero la incertidumbre reina. También se ha tenido que devolver a los clientes lo cancelado por paquetes hacia Cancún. (DB)