Colombia dijo este domingo que ya cesó las operaciones militares en una zona del este del país para permitir la liberación de dos de los cinco cautivos de las FARC, y negó estar realizando una ofensiva en la región donde fueron capturados los otros tres.
“A la fecha solo se han recibido las coordenadas del área geográfica en la cual se deberá dar la liberación de los dos soldados secuestrados en el departamento de Arauca”, indicó el ministerio de Defensa en un comunicado.
“Y el gobierno nacional, en cumplimiento de los protocolos establecidos, ya ha suspendido las operaciones de la fuerza pública en dicha área”, agregó, tras informar sobre la firma de un memorando con el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), facilitador de las liberaciones.
Según ese protocolo, los secuestrados en Arauca quedarán en libertad a más tardar a las 16H00 locales del próximo martes.
La guerrilla comunista de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) accedió a liberar a los soldados César Rivera y Jhonatan Díaz, prisioneros luego de combates el domingo 9 en una zona rural de la localidad de Tame, Arauca, así como a otras tres personas, entre ellas un general del Ejército, secuestradas el domingo 16 en el departamento del Chocó (oeste).
Las autoridades esperan ahora la información de las FARC sobre el área geográfica en la que entregarán al brigadier general Ruben Alzate, el cabo primero Jorge Rodríguez y la abogada Gloria Urrego, para suspender las operaciones militares en cumplimiento del protocolo.
“En Chocó, en este momento no se desarrolla ninguna operación de rescate. Únicamente se realiza control militar de área para la protección de los ciudadanos”, indicó el texto del ministerio de Defensa.
Agregó que el gobierno y las fuerzas armadas “siempre han cumplido a cabalidad lo establecido en los protocolos utilizados en todas las liberaciones de ciudadanos colombianos secuestrados por las FARC y este caso no será la excepción”.
Más temprano, las FARC habían dicho que las acciones del Ejército “ponen en peligro” la entrega de los cautivos.
“Mientras esta situación no sea modificada sería improbable tener de regreso a la libertad en la próxima semana al general Alzáte y a sus acompañantes”, indicaron en un comunicado, en el que denunciaron “desembarcos de tropas y bombardeos, sobrevuelos de aeronaves de inteligencia” y “comunidades prácticamente sitiadas por el Ejército” en Chocó.
El presidente Juan Manuel Santos, que tras las capturas suspendió el proceso de paz con las FARC que se desarrolla desde noviembre de 2012 en Cuba sin un cese del fuego en Colombia, dijo que reiniciará los diálogos luego de las liberaciones. AFP