El líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, apareció hoy sin bastón en imágenes de los medios estatales, algo que no ocurría desde hace meses y sugiere que se está recuperando de su misteriosa cojera.
Fotos Reuters
El diario Rodong del Partido de los Trabajadores mostró imágenes de una reunión general de comandantes celebrada la víspera en las que Kim Jong-un camina sonriente sin ayuda de su recientemente habitual bastón, entre las ovaciones de cientos de soldados.
El joven dictador, de 31 años según estimaciones, arengó a las tropas en el acto al proclamar que “es el momento de elevar el poder de Corea del Norte en el mundo”.
Tras desaparecer de la vida pública durante 40 días entre septiembre y octubre, el “líder supremo” regresó el 14 del mes pasado a las portadas de los medios estatales norcoreanos.
Desde entonces hasta hoy, en sus habituales visitas a instalaciones civiles y militares del país comunista Kim Jong-un caminaba apoyado sobre un bastón, lo que dio lugar a múltiples teorías sobre su estado de salud.
Los servicios de inteligencia de Corea del Sur (NIS) atribuyeron la cojera a la operación quirúrgica para extirparle un quiste en el tobillo, mientras otras fuentes lanzaron diversas conjeturas, desde una posible fractura hasta gota o diabetes.
En todo caso, el extremo hermetismo que el régimen impone sobre su élite -y especialmente sobre la familia Kim- impide confirmar cualquiera de las hipótesis anteriores.
El pasado verano, antes de su misteriosa desaparición de 40 días, el líder norcoreano ya apareció cojeando en la televisión estatal KCTV.
Kim Jong-un accedió al poder en diciembre de 2011 tras la repentina muerte de su padre, Kim Jong-il, y desde entonces se ha consolidado en el poder sin aparentes dificultades dando continuidad a la política “songun” del anterior dictador consistente en dar prioridad el sector militar. EFE