Norcorea difunde fotos del dictador Kim Jong-un usando bastón

Norcorea difunde fotos del dictador Kim Jong-un usando bastón

NKOREA-SKOREA-POLITICS-KIM

 

El líder norcoreano, Kim Jong-un, reapareció en público por primera vez con un bastón, tras una inexplicada ausencia de aproximadamente seis semanas que propició rumores sobre su estado de salud o incluso un posible golpe de Estado.

El dirigente realizó una visita de inspección de una urbanización recién construida en Pyongyang, anunció este martes la agencia oficial norcoreana KCNA.

Esta es la primera mención de una aparición pública del máximo dirigente norcoreano desde el pasado 3 de septiembre, cuando asistió con su esposa a un concierto en la capital. Su ausencia en el último aniversario del partido en el poder dio pie a muchas especulaciones.

La agencia noticiosa coreana indicó que Kim Jong-un efectuó una visita de “supervisión del emplazamiento” de un nuevo complejo residencial construido especialmente en la capital para los científicos que trabajan en el programa de satélites de Corea del Norte.

“Tras inspeccionar el exterior de los edificios públicos, decorados con tejas de distintos colores, expresó su profunda satisfacción y declaró que le parecían magníficos”, relató la agencia.

Un retrato de Kim Jong-un sonriente ocupaba este martes casi toda la primera plana del Rodong Sinmun, el diario del partido. Otras fotos más pequeñas mostraban al dirigente realizando la visita con un bastón negro.

Ya anteriores imágenes de televisión lo habían mostrado cojeando.

KCNA no precisó este martes la fecha de la visita, pero la agencia reseña habitualmente este tipo de eventos al día siguiente de suceder.

El breve despacho no menciona la ausencia en público del líder norcoreano, que tiene 30 o 31 años, y tampoco hace ningún comentario sobre su salud.

No es la primera vez que un dirigente de la República Popular Democrática de Corea (RPDC), el nombre oficial de Corea del Norte, no se muestra en público durante varias semanas. Pero esta ausencia de Kim Jong-un llamó la atención porque había estado omnipresente en los medios de comunicación oficiales desde que llegó al poder.

Las hipótesis se multiplicaron. Algunos mencionaron distintos problemas de salud del dirigente norcoreano, un gran fumador que ha ganado mucho peso en un año: cansancio, gota, fractura de tobillos, diabetes. Otros llegaron a hablar de golpe de Estado.

Los rumores crecieron el viernes pasado ante la ausencia de Kim Jong-un en la peregrinación que marcó el aniversario del partido en el poder, donde estaban presentes los máximos dignatarios del régimen.

El gobierno surcoreano declaraba no obstante que sus servicios secretos estimaban que Kim Jong-un seguía controlando con firmeza el poder.

Durante su visita al complejo residencial, el dirigente norcoreano iba acompañado por varios altos responsables del régimen, incluyendo Hwang Pyong-so, flamante vicepresidente de la Comisión de Defensa y considerado el número dos del régimen.

“Seguimos sin saber hasta qué punto se ha recuperado (Kim Jong-un) de su aparente ‘indisposición’ y cuál era su gravedad”, estima Kim Yeon-chul, especialista de Corea del Norte en la universidad surcoreana de Inje.

“Lo importante es que esto corrobora las observaciones de Corea del Sur, China y Estados Unidos en el sentido de que Kim Jong-un dirige el país con toda normalidad”, añade.

Una delegación norcoreana de alto nivel encabezada por Hwang Pyong-so realizó una visita sorpresa a Corea del Sur a primeros de octubre.

Esta visita excepcional, que dio pie a un acuerdo para reanudar un diálogo de alto nivel, fue interpretado por algunos como un mensaje de normalidad en Pyongyang.

La delegación aseguró a las autoridades surcoreanas que Kim Jong-un no tenía ningún problema de salud.

Exit mobile version