El señor Alonso Salazar tiene 14 años en la barbería “Norma y Alonso”, ubicada en la calle Democracia en el centro de Puerto La Cruz. Afirma que en su trayectoria nunca tuvo dificultades como ahora para prestar un servicio de calidad a sus clientes tradicionales. eltiempo.com.ve / Vanessa Sá
“Aquí hemos llegado al colmo de los colmos con la escasez. La gente ya no puede ni cortarse el cabello porque las hojillas desaparecen, al igual que la espuma de afeitar y hasta el champú”.
Salazar explica que ya no consigue con facilidad las cuchillas que usa para sus navajas de afeitar, por lo que le ha tocado acudir a otros artefactos para poder “sacar” el corte.
“A veces vienen algunos revendedores por ahí para venderme el producto. Hasta en 20 bolívares cuesta una hojilla que sólo se puede usar una vez porque eso es desechable. Yo he optado por usar una máquina de corte pequeña, que funciona con baterías y cuando no puedo usar la navaja, uso esa”.
El barbero también aprovechó para denunciar su molestia por no conseguir los medicamentos que debe tomar a diario. “Además de no conseguir material para trabajar, no consigo mis medicinas de la tensión para mantenerme con vida. Esto se lo llevó quien lo trajo”.
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