La guerrilla comunista de la FARC se mostró satisfecha este jueves con “la dinámica” de los diálogos de paz con el gobierno en La Habana, e insistió en la urgencia de decretar un cese al fuego bilateral en Colombia.
“Las FARC manifiestan su complacencia por la dinámica favorable a la consecución de la paz que va tomando el proceso de diálogo”, dijo a la prensa el jefe negociador de la guerrilla, Iván Márquez, al cierre del ciclo 28 de las conversaciones, que se reanudarán el 23 de septiembre.
Las partes, que discuten actualmente el complejo tema de reparación de víctimas, ha recibido en La Habana “dos visitas exitosas” de personas afectadas por el conflicto armado de más más de cinco décadas.
Divididos en grupos de 12 personas, las víctimas brindaron testimonios y propuestas.
“Si decimos que las víctimas están en el centro de ese proceso y que su voz debe ser escuchada para que las palabras no queden meramente en el plano de la retórica, creemos que es el momento de hacer nuestro su clamor manifiesto de manera unánime (…)(para que) de manera urgente se dé un cese bilateral al fuego y las hostilidades”, dijo Márquez.
En un comunicado entregado a la prensa el miércoles, el segundo grupo de víctimas urgió por un cese al fuego bilateral como única vía para detener las afectaciones directas a personas o grupos humanos.
La delegación oficial, encabezada por el exvicepresidente Humberto de la Calle, se abstuvo de hacer declaraciones a la prensa.
Desde que se iniciaron las negociaciones de paz en La Habana, en noviembre de 2012, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) han decretado cuatro cese al fuego unilaterales, a los que el gobierno rechaza sumarse hasta tanto no se alcance el acuerdo final.
La administración de Juan Manuel Santos afirma que esas treguas serían usadas por la guerrilla para fortalecerse militarmente, como ocurrió en el fracasado proceso de paz del Caguán, terminado en 2002.
Hasta ahora las partes han consensuado tres de los seis puntos de la agenda: reforma rural (mayo de 2013), participación política (noviembre de 2013) y drogas ilícitas (mayo de 2014).
Además del la atención a las víctimas, quedan pendientes los temas del abandono de las armas por las FARC y el mecanismo para refrendar un eventual acuerdo de paz. AFP