José Alexander Salas, de 20 años, murió al recibir múltiples impactos de perdigones en la cabeza. En el hecho, que ocurrió el pasado viernes poco después de las 2:00 de la tarde, resultó herido Jovert José Méndez (33), cuando un proyectil le rozó la región temporal, reseñó El Tiempo.
Ambos se encontraban realizando trabajos de albañilería en una casa ubicada en la calle Araguaney del barrio San Valentín Sur, en El Tigre.
Testigos del crimen señalaron haber visto a dos jóvenes en una bicicleta, uno de ellos con una bácula, que estuvieron escondidos varios minutos detrás de un paredón que colinda con un terreno baldío.
A pesar de que los sujetos mostraban una actitud sospechosa, las personas que estaban cerca del lugar decidieron encerrarse en sus residencias por seguridad.
A los pocos minutos escucharon una fuerte detonación que los motivó a salir para averiguar qué había pasado.
Más de un curioso se aproximó a la vivienda donde en un angosto porche yacía tirado el cadáver de Salas.
Cerca de él estaba Méndez, quien pedía que lo auxiliaran y trasladaran a la emergencia del hospital general de El Tigre, donde fue atendido por los galenos.
Los hechos
Una mujer, que pidió omitir su nombre por seguridad, contó que José Alexander y Jovert comenzaron desde temprano a colocar tablones en el techo de la casa, que es propiedad de una señora de nombre Martha.
Después se fueron a almorzar y a descansar para seguir la faena que iniciaron el pasado martes.
Méndez contó que ambos estaban montados en un pipote que hacía las veces de andamio, cortando y entrelazando las cabillas para instalar las pestañas de concreto, cuando escucharon las detonaciones.
José Alexander, quien estaba detrás de él, apenas pudo exclamar: “Chamo, ¿qué pasó?”. Luego cayó al suelo.
“Perdí el control y también caí. Fue entonces cuando me percaté de que al muchacho lo habían matado. Es una lástima porque era sano y tuvo la buena voluntad de recomendarme para que trabajara con él en la obra”.
Se conoció que desde que comenzó a operar el cuadrante policial N° 21, Salas se dedicó a denunciar incidentes y a los delincuentes que mantienen azotados al sector. Presumen que eso pudo ser la causa del homicidio.
Datos
Se conoció que José Salas tenía dos años residenciado a dos casas de donde lo mataron, en la calle Araguaney del sector San Valentín Sur. Desde hace seis meses vivía con Maribí Subero Figueroa (18), quien tiene cinco meses de embarazo. El muchacho planeaba comprar la cuna, el corral y la ropa de su primogénito con su primer pago.
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