La rinitis alérgica y sus complicaciones

La rinitis alérgica y sus complicaciones

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Ni niños ni adultos se salvan de la Rinitis Alérgica (RA). La estornudadera recurrente acompañada de congestión y secreción nasal, además de picazón en los ojos, la nariz y el paladar constituyen los síntomas característicos de esta condición,  que al no ser tratada a tiempo puede provocar infecciones bacterianas y virales, rinosinusitis (inflamación de la cavidad nasal y los senos paranasales), otitis, pólipos nasales, enfermedad broncopulmonar obstructiva crónica, hasta hipertrofia de los cornetes, cuyo tratamiento es solo quirúrgico.

Al respecto, la Dra. Adriana Pérez García, otorrinolaringóloga y coordinadora docente del posgrado de Otorrinolaringología del Hospital San Juan de Dios, explicó que la RA aumenta la producción de moco y la inflamación en los senos paranasales, cavidades cuya funciones son: actuar como caja de resonancia para la voz, protección y disminución del peso del cráneo y colaborar con la humificación y calentamiento del aire. “Al no recibir tratamiento, estas cavidades huecas se llenan de moco y se convierten en caldo de cultivo ideal para bacterias y virus. Algo parecido sucede con los cornetes, que al estar en contacto frecuente con el alérgeno crecen de manera exagerada provocando que la persona no pueda respirar normalmente por lo que requiere de cirugía”.





Indicó que hoy en día, para tratar la rinitis alérgica sola o asociada a asma bronquial se utiliza la combinación en un solo fármaco de desloratadina –un antihistamínico no sedante- y montelukast –un inhibidor de leucotrienos-, terapia altamente efectiva porque frena la reacción alérgica, elimina los síntomas y bloquea la respuesta inflamatoria. Según la Dra. Pérez, este nuevo fármaco facilita el tratamiento de la RA a los pacientes ya que solo tienen que comprar y tomar una sola tableta.

La RA se produce al tener contacto con alérgenos como el polen, los ácaros del polvo, hongos, animales, entre otros. “La reacción alérgica puede ser inmediata o retardada, es decir, horas después de la exposición al alérgeno. La intensidad y duración de la sintomatología dependerá de cada persona, mientras más frecuente sean las crisis mayores serán los efectos sobre la vía aérea (bronquios y nariz)”. Por ello, es indispensable la visita al otorrinolaringólogo y al alergólogo, quienes serán los encargados de diagnosticar y tratar la enfermedad.