Lo que comenzó con un retraso en las cirugías por la falta de insumos se convirtió en una verdadera crisis hospitalaria con el paro de médicos que arrancó el 30 de mayo, generando una larga lista de pacientes que esperan por operaciones.
Hay casos como el de Ana Campos quien lleva 65 días hospitalizada en el área de cirugía de mujeres del Hospital Central Antonio María Pineda esperando por una intervención porque tiene la tibia fracturada. Señala que en estos dos meses ha gastado 35 mil bolívares en insumos y exámenes médicos puesto que en el centro de salud “no hay nada”.
“Cuando ingresé me dijeron que las cirugías estaban retrasadas por falta de insumos, médicos ni cupo en pabellones, pero ahora con el paro médico quién sabe cuándo me van a operar”, lamenta la joven de 25 años.
Luis García es otro de los pacientes del área de Traumatología quien lleva un mes y 20 días añorando su ingreso al quirófano, pues ya tiene las placas metálicas y materiales para la operación que tuvo que comprar gastando 25 mil bolívares.
“De paso tenemos que gastar hasta en comida porque la de aquí es maluca y siempre dan lo mismo”, agrega.
Leer la nota completa en La Prensa de Lara