Este es probablemente el mejor uso que se le puede dar a una autopista. Convertirla en un tobogán de agua gigante.
La calle Parque de Bristol se transformó en 300 pies de diversión, cuando fue cubierta por los vecinos de la localidad en una atracción de verano con mucha agua y jabón. Reseña Metro
La idea del tobogán se le debe al artista Luke Jerram y forma parte de la iniciativa de Bristol, donde buscan hacer los domingos diferentes.
A juzgar por lo que se muestra en las fotografías, este domingo no fue solo especial, siendo realmente el mejor domingo de la historia.
Jerram le dijo al periódico The Guardian que “queremos mantener el tobogán abierto todos los días durante ocho meses, para que así todos los que deseen pueden usarlo”.
Ojala sus deseos se pudieran hacer realidad, pero hay que recordar que el gran juguete fue puesto en una vialidad, que es altamente usada en los días de semana.
La atracción fue construida a base de plástico, sábanas y material de embalaje.
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