La defensora del pueblo, Gabriela Ramírez, resaltó este viernes al importancia del diálogo establecido entre el Gobierno Bolivariano y sectores de la oposición para lograr el equilibrio y la paz del país, luego de los reiterados llamados hechos por el presidente Nicolás Maduro.
AVN
Ramírez comentó que espera que “esta mesa sea un mensaje de paz (…) El simple hecho de mostrarse proclive al diálogo es para nosotros un gran avance, una gran conquista. Esperemos que esto nos sea un día nada más y que realmente el diálogo sea genuino, constructivo y arroje resultados de paz en nuestro país”.
Durante una entrevista concedida al programa En análisis con el Padre Vidal, transmitido por Coquivacoa TV, refirió que el resultado esperado del diálogo convocado por el presidente Nicolás Maduro, durante ocho semanas, es la paz del país y que los venezolanos puedan continuar con su vida normal con el cese de las acciones violentas iniciadas desde febrero pasado por grupos antichavistas, con el objetivo del derrocamiento del Gobierno constitucional.
Añadió que las acciones violentas comenzaron el 6 de febrero en el estado Táchira, como parte de un plan desestabilizador, cuando se tomaron acciones para corregir las desviaciones de alimentos hacia Colombia. “Desde ese momento comenzaron los hechos violentos en el país y se fueron prendiendo focos”, subrayó.
Expresó que en el territorio han habido manifestaciones pacíficas tanto de la oposición, como en respaldo del proceso revolucionario. “A estas manifestaciones pacÍificas las respalda la Constitución, pero estas no tienen nada que ver con los focos violentos y la obstrucción de vías”, dijo.
Mostró su rechazo a las acciones violentas y a la manipulación de la información en redes sociales, que muestran imágenes de violación de los Derechos Humanos que se han presentado en otros países como si pertenecieran a la realidad venezolana.
Ramírez aseveró que la Defensoría del Pueblo trabaja para todos los venezolanos y sin distinción política, como algunos sectores radicales han querido hacer ver.
“Cuando se quiere promover un cambio de gobierno, los Derechos Humanos son un tema sensible. Y cuando se extiende la violencia, la vulnerabilidad de los Derechos Humanos es extrema”, añadió.
Aclaró que su trabajo es defender al pueblo, y no un cargo, que además éste es por un periodo único y no reelegible.
“La figura del defensor del pueblo está blindada contra la infamia de pensar que quien defiende al pueblo, defiende una posición política”, enfatizó.