A la Defensora del Pueblo, Gabriela Ramírez no le agradó que la dirigente de Un Nuevo Tiempo, Delsa Solórzano le pidiera algo que debe ser utilizado como bandera por cualquier funcionario público, tener “imparcialidad”.
Solórzano se refirió a los hechos violentos que se presentaron en las protestas estudiantiles de Mérida y Táchira, para solicitar a Ramírez cumplir con su función de garantizar respeto a los derechos humanos de los estudiantes detenidos.
“Señora defensora del pueblo @gabrieladelmarp cumpla con su función de garantizar respeto a los DDHH de los estudiantes detenidos (…) Ser imparcial es parte de su trabajo señora. Cumpla con él o renuncie”, escribió la dirigente opositora a través de su cuenta en Twitter.
Seguidamente la funcionaria rechazó este comentario al decir: “No soy imparcial. Soy de La Paz y no de la violencia. Soy de la verdad y no del montaje. Soy del respeto y no del insulto”.
“¿Qué significara imparcialidad para @delsasolorzano? ¿Aplaudir la violencia? ¿Defender el boicot? ¿O pedir un papel en su Twitter-novela?”, dijo Ramírez.