José Vásquez pidió permiso en el ministerio donde labora en Aragua para adquirir la leche en polvo. Se llevó a una compañera de trabajo a quien también le urgía la compra del alimento que había llegado a una red de supermercados que se ubica relativamente cerca del puesto laboral, publica El Carabobeño.
Y es que los permisos para hacer una cola por más de cuatro horas y adquirir los alimentos en escasez se convirtieron en más que justificados para los trabajadores y que deben ser reconocidos por las empresas.
En la afueras una patrulla del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin) custodiaba el supermercado. A pesar de la aglomeración de compradores, hubo ausencia absoluta de funcionarios de PoliAragua o PoliNacional, garantes del orden público.