¿Puede un pene quedarse atorado dentro de una vagina? La perturbadora respuesta es sí.
Según el doctor John Dean, director clínico de la unidad de medicina de género y sexual de NHS Trust, el mecanismo fisiológico detrás del síndrome del pene cautivo (penis captivus):
“Lo que puede ocurrir es que cuando el pene está dentro de la vagina, este se distienda. Los músculos del piso pélvico de la mujer se contraen rítmicamente durante el orgasmo; mientras esos músculos se contraen, el pene se atora y se hincha más…”
A decir de Dean, solamente cuando los músculos vaginales vuelven a su posición original (es decir, cuando el flujo de sangre en el cuerpo se normaliza) el pene puede salir. Pero contrario al mito de la “vagina dentada”, el pene cautivo no parece ser una condición dolorosa, pero sí sumamente incómoda.
Para Dean, lo que vuelve fascinante este síndrome y le da valor de leyenda urbana es la imagen “de una pareja luchando para separarse mutuamente durante muchos minutos”, aunque en realidad puede que no duren más de 10 segundos. “Ciertamente he escuchado [del síndrome del pene cautivo] en mi consultorio, y ocurre durante unos pocos segundos.”
Fuente: Avantsex