Un tatuador estadounidense, de la ciudad de Baltimore, se ha hecho muy popular en los últimos años y ha llegado a tener 1.400 clientes al año de distintas partes del mundo. Su especialidad es tatuar pezones a las mujeres que los han perdido producto del cáncer.
Su trabajo en 3D le ha dado gran reputación, al punto que ha alcanzado un número de clients similar al que tienen los médicos que suelen encargarse de esta etapa de la recuperación.
Cuenta a BBC mundo el dueño de Little Vinnie’s Tattoos, que ha recorrido el mundo y que ha atendido a mujerees incluso de ARabia Saudita, donde los tatuajes están prohibidos. “Tengo otros tatuajes, pero nunca pensé que me haría los pezones”, comentó al medio ingles, Sarah, una clienta de 30 años.
Vía bbc.co.uk