La carrera política de Anthony Weiner está atravesada por escándalos sexuales. El antecedente más importante se produjo en junio de 2011, luego de que se hicieran públicos los intercambios de correos, imágenes y videos de alto contenido erótico entre él y varias jóvenes que no superaban los 20 años. En esa oportunidad se había visto forzado a renunciar a su banca en la Cámara de Representantes, publica Infobae.
Por eso sorprendió a muchos que sólo dos años después viviera un renacimiento tan importante como para ser uno de los principales candidatos a la alcaldía de Nueva York.
Pero Weiner no aprendió la lección. El pasado martes 23, el sitio The Dirty publicó unafoto suya de la cintura para abajo en la que se puede apreciar su total desnudez. Junto con la imagen, que se filtró porque él mismo se la envió a una joven que estaba conociendo, la publicación mostró los mensajes que se enviaba con ella a fines de 2012.
“Me estoy bañando, ¿quieres acompañarme?”, “Quiero susurrarte al oído mientras te hago el amor. ¿Te parece bien?”, o “¿Entonces no me dirás qué foto mía te gustó más o te excitó más?”, son algunos de los mensajes más suaves que Weiner envió a su amante a través de las redes sociales Facebook y Formspring, donde se apodaba”Carlos Danger”.
Para intentar salir de la difícil situación en la que quedó, el candidato convocó a una conferencia de prensa horas después de que se publicaran las fotos. “Algunas de estas cosas ocurrieron antes de mi renuncia, otras después, pero lo cierto es que fue durante el momento en el que mi esposa y yo estábamos trabajando en nuestro matrimonio”, dijo.
A pesar de todo, aseguró que no bajará su candidatura. “Eso es lo que mis oponentes querrían que hiciera”, afirmó.
Pero la protagonista fue Huma Abedin, su esposa, una de las principales asesoras de Hillary Clinton, quien siendo primera dama atravesó una situación muy similar cuando salió a apoyar a Bill Clinton, su marido, luego de que saliera a la luz su encuentro sexual con Mónica Lewinsky.
“Anthony cometió algunos errores terribles. Pero lo amo, lo perdono y creo en él. Como dijimos desde el principio, seguiremos adelante”, dijo durante la conferencia de prensa.
“Cuando afrontamos esto hace dos años fue el comienzo de un período muy difícil de nuestro matrimonio, y nos tomó mucho tiempo salir adelante. Necesitó mucho trabajo y un montón de terapia”, agregó.
Y para no dejar dudas de que marido y mujer tienen muy claro el objetivo de llegar a la alcaldía de Nueva York, Abedin aclaró que no piensa divorciarse. “Tomé la decisión de que valía la pena quedarme en este matrimonio. No fue una decisión fácil, pero la tomé por mí, por nuestro hijo y por nuestra familia”, concluyó.