La fuerza armada venezolana está recibiendo apoyo de técnicos cubanos para la recuperación de misiles, informó el miércoles el mayor general Wilmer Barrientos, jefe del Comando Estratégico de la institución armada.
Técnicos cubanos participaron en la reparación de un sistema de artillería venezolano, indicó Barrientos, a la televisora estatal, en el acto de lanzamiento del misil antibuque Otomat MK2 que fue recuperado con apoyo de Cuba.
El oficial señaló que Venezuela cuenta con su propia capacidad tecnológica para reparar sus sistemas de armas de artillería, aunque precisó que este caso se tuvo “la participación de unos técnicos de la República de Cuba”.
El jefe militar no ofreció detalles del apoyo que prestaron los técnicos cubanos para actualizar el misil Otomat que adquirió Venezuela en los años 70.
El presidente Nicolás Maduro, quien viajó a la isla de La Orchila para presenciar el lanzamiento del misil, aprovechó el acto para agradecer a Cuba por “todo el apoyo”, y afirmó que entre las fuerzas armadas de los dos países hay una “hermandad profunda”.
Maduro indicó que las fuerzas armadas del bloque de la Alternativa Bolivariana para los pueblos de América (ALBA), esperan profundizar el acercamiento. El bloque lo integran Venezuela, Cuba, Ecuador, Bolivia, Nicaragua, Dominica, Antigua y Barbuda, San Vicente y Las Granadinas.
El mandatario estuvo acompañado en el acto del presidente de la Asamblea Nacional, diputado oficialista Diosdado Cabello y el ex vicepresidente y ex ministro de Defensa, José Vicente Rangel.
Venezuela y Cuba desarrollaron estrechas relaciones durante los 14 años del gobierno del fallecido presidente Hugo Chávez.
Durante la administración de Maduro, quien asumió el gobierno el mes pasado tras ganar en los comicios presidenciales, los lazos entre los dos países se han mantenido. Maduro, de 50 años, es señalado de ser muy cercano al gobierno cubano.
Venezuela envía al año más de 100.000 barriles de petróleo diarios a la isla en condiciones preferenciales, y a cambio recibe el apoyo de varios miles de cubanos que laboran en territorio venezolano en el área de salud, educación, y deporte.
La oposición venezolana ha acusado a los dirigentes cubanos de ejercer influencia tras bambalinas en la orientación de las decisiones del gobierno y la fuerza armada.
Un grupo de congresistas opositores difundió a comienzos de semana una grabación de presunta conversación entre el connotado conductor de un programa de la televisión estatal, Mario Silva, y un supuesto funcionario de inteligencia cubana identificado como el teniente coronel Aramis Palacios, donde se hacen revelaciones de corrupción y divisiones en el oficialismo.
El secretario general del partido opositor Primero Justicia, diputado Tomás Guanipa, exigió el miércoles a las autoridades abrir una investigación sobre la grabación alegando que Silva habría incurrido en “traición a la patria” al revelar informaciones a un funcionario cubano.
“Esto es una afrenta a la institucionalidad, a la soberanía y a la independencia”, dijo Guanipa a la prensa.
Maduro rechazó en la víspera la grabación y dijo que el diputado opositor Ismael García, que difundió el audio, “no tiene moral para hablarle a este país de nada”.
El mandatario hizo un llamado a sus seguidores a no dejarse “desmoralizar… porque detrás de esa basura llamada Ismael García hay una guerra psicológica, para tratar de destruir la revolución bolivariana, para dividirla, para tratar algo que no han logrado ni lograrán”.
“Rechazo categóricamente todo el montaje que ha sido expuesto… Es absolutamente falsa la grabación presentada por la ultraderecha”, dijo Silva la noche del lunes en su programa nocturno al objetar el audio y se puso a la orden de las autoridades judiciales.
Silva, una influyente figura del oficialismo, anunció que dejaría por un tiempo su programa “La Hojilla” de la televisora estatal para atender problemas de salud.
AP