El presidente de Fedecámaras, Jorge Botti, considera inminente una paralización de la economía venezolana. “Cada día está acercándose más el momento en que comience a manifestarse una crisis económica de proporciones mayores”, advirtió en entrevista con Unión Radio.
Aclaró que no es correcto decir que la economía venezolana está quebrada, pues el país recibe 100 mil millones de dólares al año en ingresos petroleros y, por tanto, “no tiene ninguna razón para estar como está”.
Sin embargo, sostiene que la situación reclama la aplicación de correctivos “que van a ser complicados y que requieren de piso político de las partes que están en pugna en el país”.
Insistió que el gremio a mediados del año pasado y también en el mes de diciembre advirtió al gobierno sobre la necesidad de tomar medidas y que si no se tomaban los correctivos necesarios “el primer trimestre del presente año sería muy duro en materia de suministros y de abastecimiento en general”.
“Estamos atados de manos, ninguna empresa en Venezuela aun cuando disponga de todos los bolívares del mundo puede ponerle mano a divisas de forma legal a menos que el aparato del Estado te de permiso para hacerlo”, alegó.
Subrayó al país que, como sector responsable, “esto se está poniendo muy complicado, y que es apremiante la situación de inventarios”.
Citó como ejemplo que después del mes de diciembre los diferentes sectores de alimento, calzado, medicamentos, entre otros, poco a poco han venido manifestando sus inconvenientes.
Botti aseguró: “Esto no es una amenaza, es una realidad que estamos viendo, estamos haciendo magia, estamos estirando los inventarios, hay hasta trueques e intercambio de materias primas en empresas que se manejan en el mismo sector”
Para el representante de Fedecámaras, la situación económica del país no se arregla con insultos ni con amenazas y descalificaciones; sino que por el contrario se soluciona conversando.